El meta Manuel Neuer, recolector de trofeos con el Bayern Múnich y responsable de una buena parte del éxito de Alemania en Brasil 2014, es ahora el intruso ocasional que disputa la corona individual del fútbol Mundial a los astros Leo Messi y Cristiano Ronaldo. Señal EN VIVO a partir de las 11:30 am (Hora de Costa Rica).
De la misma forma que sucedió en el 2013 con el francés Franck Ribery, o en el 2012 y 2011 con los españoles Andrés Iniesta y Xavi Hernández, respectivamente, la presencia de Neuer alienta una nueva posibilidad de derribar la apabullante autoridad que comparten el argentino del Barcelona y el portugués del Real Madrid.
El portero germano es el que completa la terna de aspirantes en la gala del Balón de Oro que premiará el lunes en Zúrich al mejor del año 2014.
Una vez más, la indefinición en los criterios estimula el debate y alimenta los argumentos de cada aspirante. En la carrera intervienen opiniones de futbolistas, de aficionados y de medios de comunicación. Incluso de los propios protagonistas. Intereses dispares y opiniones contrapuestas. Argumentos que para un caso son válidos e inservibles en otros.
En cualquier caso, el Balón de Oro, que para algunos no es más que un montaje futbolístico y una fiesta plagada de artificios, es un reconocimiento que engrandece el currículo y el ego del ganador.
No existe un baremo claro para determinar al merecedor. Unos años el premiado fue el jugador, individual, más destacado del curso; otros, el más relevante dentro de unos éxitos colectivos; en ocasiones, el considerado el mejor del mundo; y en el resto, algunos que no tenían que ver con nada de esto.
Desde mitad del ejercicio arrancan las primeras especulaciones sobre el merecedor. Las cifras de Cristiano Ronaldo, muy superiores a las de Leo Messi, habían silenciado el debate. El luso estaba abocado a su tercer trofeo, el segundo seguido. Sin embargo, el papel de Neuer en Brasil 2014 generó una corriente distinta, alentada, incluso, por el presidente de la UEFA, el francés Michel Platini, que se posicionó públicamente del lado del meta.
Desde el 2007 Messi y Cristiano forman parte de la gala. Ese año, sin embargo, ninguno ganó. Ambos quedaron a la sombra de Kaká. Un año después, el luso consiguió, con el Manchester United, su primer trofeo. Y a partir del 2009 llegó el absolutismo de Messi, vencedor cuatro ediciones seguidas hasta que el pasado curso, el 2013, Ronaldo, ya con el Real Madrid, derribó el dominio del argentino.
No parece que Leo Messi sea el favorito en esta ocasión. Ronaldo y Neuer dan la sensación de estar un paso por delante en las especulaciones. Aunque los tres dispusieron de argumentos para convencer a los votantes.
El año de 2014 no pudo empezar mejor para Cristiano Ronaldo, que se convirtió en el primer futbolista portugués que ganaba dos premios al Jugador Mundial de la FIFA. Fue el máximo goleador de la liga española, con 31 tantos en 30 partidos, y tuvo una participación fundamental en el décimo título de la Liga de Campeones del Real Madrid, al batir el récord de dianas en una sola edición del torneo. Además conquistó otra Copa del Rey y la Supercopa de Europa. Defiende el título y opta a su tercer galardón
Neuer resultó clave en la conquista de la Copa Mundial en Brasil 2014 por parte de Alemania y se adjudicó con todo merecimiento el Guante de Oro al mejor guardameta del certamen. Además, ganó dos títulos más con su club: la Liga y la Copa alemanas. Se ha convertido el germano en la reivindicación de los porteros, que reclaman un reconocimiento de esta dimensión para este puesto. Puede convertirse en el segundo portero que gana el Balón de Oro, premio creado en 1956, y que solo ha distinguido a un meta, el soviético Lev Yashin en 1963.
Messi acabó como segundo goleador de la Liga con 28 goles aunque el Barcelona no resultó campeón. En la Liga de Campeones llegó a los cuartos de final y con la selección guió a Argentina hasta la final del Mundial, donde anotó cuatro tantos y obtuvo el Balón de Oro al mejor jugador. Este año, además, se convirtió en el máximo anotador histórico de la Liga española.
Zúrich será una vez más escaparate de estrellas del fútbol mundial. La designación del Balón de Oro será el colofón a una serie de reconocimientos que alientan la configuración de la ceremonia, donde también se aplauden a la mejor jugadora, a los más destacados entrenadores o al gol más espectacular. Una cita engalanada con leyendas del mundo del fútbol, que contemplará el pasado y el presente de este deporte.
El reconocimiento como mejor entrenador también está plagado de alicientes. El italiano Carlo Ancelotti, técnico del Real Madrid, con el que firmó una temporada de ensueño, el alemán Joachim Low, que llegó a su selección al éxito en Brasil 2014 y el argentino Diego Pablo Simeone, artífice del 'milagro' del Atlético Madrid, sensación de la temporada, son los candidatos en Zúrich.
En la categoría femenina, la brasileña Marta vuelve a aspirar al Balón de Oro, que ya ganó en 2006 y 2010, y que se disputará con la alemana Nadine Kessler y la estadounidense Abby Wambach, vencedora en 2012.
En el apartado de técnicos de equipos femeninos, los tres finalistas son, el alemán Ralf Kellermann, entrenador del Wolfsburgo, la seleccionadora de los equipos inferiores de Alemania, Maren Meinert, y el seleccionador japonés, Norio Sasaki, vencedor en 2011.
Zúrich también elegirá al mejor gol del año, el llamado premio "Puskas", al que optan el conseguido por la irlandesa Stephanie Roche con el Peamount United, el del colombiano James Rodríguez logrado en el Mundial contra Uruguay, y el que marcó el holandés Robbie van Persie de cabeza a España en esa misma competición.
LOS ASPIRANTES
Manuel Neuer
Además de todo, ahora tiene la bendición de ‘Dios’: la semana pasada Diego Armando Maradona dijo que su candidato para ganar el Balón de Oro es Manuel Neuer. “Tiene más méritos”, declaró El Pelusa, reforzando su argumento al decir que, para él, Messi y Ronaldo se relajaron: “Creo que se tomaron un descanso”, comentó desde Cuba.
Sin bien las declaraciones del mejor jugador de la historia no tienen incidencia alguna en la elección, sí son muy dicientes al reflejar una de las sensaciones que desde finales del año pasado le vienen dando la vuelta al planeta fútbol: posiblemente llegó la hora de que otro arquero reciba la máxima distinción del balompié mundial; algo que no sucede desde 1963, cuando el merecedor fue esa leyenda que acostumbraba vestir luto para ir a las canchas, le decían ‘la araña negra’ y se llamaba Lev Yashin.
Además de haber salido campeón de la Bundesliga con el Bayern de Múnich, el año pasado Neuer fue campeón del mundo con la selección alemana, siendo figura en un equipo de estrellas donde destacarse no era tarea sencilla. Pero lo hizo. Con 25 atajadas definitivas y solo 4 goles recibidos en 7 partidos, fue elegido como el mejor guardameta del Mundial, superando al costarricense Keylor Navas y al argentino Sergio Romero. Tras recibir el Guante de Oro, Neuer compartió el título con su equipo y su país: “No solo los que jugamos somos campeones, todos somos campeones del mundo, todo el banquillo, toda Alemania”.
Las virtudes que lo han llevado a disputarle la corona a los indestronables Messi y Ronaldo, no solo han quedado demostradas bajo los tres palos, donde él es un gato con tentáculos capaz de estirarse casi hasta cualquier parte, sino jugando con los pies dentro y fuera del área chica. Las estadísticas del Mundial de Brasil son una de las tantas demostraciones que ha dado. De acuerdo con las cuentas oficiales de la Fifa, el alemán superó a Messi en pases completados: el argentino hizo 242 pases acertados, Neuer hizo 244.
En este momento, no hay otro arquero más completo que él. Es serio en la portería y a pesar de sus 1,93 ataja muy bien por debajo. En el juego aéreo su eficiencia es incuestionable y tiene gran visión de juego. Es quizás, el mejor portero-libero, o tal vez el único. En Alemania lo ha ganado todo y para el diario L’Équipe, fue el jugador del 2014 por encima de CR7 y ‘la pulga’.
Cristiano Ronaldo
Es el dueño del último Balón de Oro entregado por la FIfa, superando a quien parecía insuperable: su rival y su martirio, el argentino Lionel Messi. En el 2013, cuando le fue entregado el galardón, Cristiano lloró impotente ante la emoción incontenible de un logro con el que se había obsesionado aunque públicamente dijera lo contrario. Porque él siempre quiere ser el primero y la derrota lo martiriza tanto como una pulga escondida en su colchón.
Ronaldo llega a la gala de Zurich con merecimientos de sobra, aunque no en su mejor momento. A pesar de que lleva un par de meses alejado de su mejor condición goleadora con el Real Madrid, el año pasado, vestido de merengue, obtuvo la Copa del Rey, ganó la tan ansiada décima ‘orejona’ y ahora en diciembre se coronó campeón mundial de clubes tras vencer en Marruecos al San Lorenzo de Almagro.
La décima Champions, el objetivo principal que desde su llegada al club más ganador e histórico de la capital española, le fue trazado, fue una exhibición de toda su capacidad futbolística, en un derroche de talento y genialidad al que no le faltó absolutamente nada: desde el comienzo hasta la fase definitiva, Cristiano Ronaldo hizo goles de todas las formas posibles: cabeza, remates de larga distancia, tiros libres, remates de larga distancia, dejando en el suelo a los defensores tras un dribling en velocidad.
La Liga de Campeones, fue su patio de recreo: marcó en 6 juegos seguidos y allí, en esa competición, ostenta la mayor cantidad de tantos conseguidos en la ronda eliminatoria: 35. En el camino a la décima, CR7 marcó 9 veces en la fase de grupos, cosa que nadie más ha hecho hasta ahora. En total, en la temporada 2013-2014, hizo 53 goles.
Por ello, reveló la semana pasada el diario español Mundo Deportivo, es que el portugués lidera la votación que lo llevaría a recibir su tercer Balón de Oro. Mundo Deportivo hizo un sondeo en el que consultó a 24 medios internacionales y en 16 de ellos, el nombre de Cristiano Ronaldo apareció en letras doradas.
Lionel Messi
Su apellido es suficiente explicación para la candidatura: es Messi, el extraterrestre rosarino que a punta de hormonas inyectadas desafió a la naturaleza para encontrarse con su destino, que no era otro que un balón de fútbol pegado a su pie izquierdo. Es Messi, el diez del Barcelona, el equipo que en la era de Guardiola convirtió el juego en una obra de arte contemporáneo. Es Messi, el argentino medio autista que solo habla con la pelota para gritar gol y hacerle entonar el mismo grito al planeta que lo idolatra. Es Messi, el chico que ya hizo historia por eso y otras tantas cosas que parecían imposibles, como haber ganado cuatro balones de oro de forma consecutiva: 2009, 2010, 2011 y 2012.
Aunque el 2014 no fue justamente su año más luminoso, la posibilidad de ganar el quinto balón dorado está sustentada sobre logros a los que no les falta brillo: en el Mundial, donde logró el subtítulo y marcó goles cruciales para que Argentina clasificara a la final, la Fifa lo eligió como el mejor jugador del campeonato. Vistiendo la camiseta culé, con la que su fútbol siempre se ve más feliz, rompió los récords que le faltaban: batió al mítico Telmo Zarra, quien desde 1955 se había quedado con la corona del máximo goleador histórico de la liga española (Zarra hizo 251 goles en 277 partidos, ‘la pulga’ lo superó al marcar 253 en 250 juegos) y se llevó por delante la marca de los 71 goles que en Champions League marcó el interminable Raúl González. Como si no se cansara, apenas un año atrás el argentino había conseguido la racha más larga marcando en España, anotando 33 goles en 21 jornadas consecutivas, desde la 11 hasta la 34 de la Liga 2012-2013.
Su talento sobrehumano nunca está en duda, pero incluso los superhéroes se cansan. Y se lesionan. Y las lesiones recurrentes son el gran obstáculo que en esta ocasión hay entre Lionel y el Balón de Oro: ha sufrido roturas musculares en los bíceps femorales de ambas piernas que lo han mantenido lejos de la cancha mucho tiempo. Y Messi, lejos de un campo de juego, se extravía, entristece, se opaca. Y se opaca todavía más cuando pierde. Y más, cuando deja de ganar trofeos importantes, como le ha ocurrido con el Barcelona bajo el mando de Martino y ahora de Luis Enrique. Por eso, en parte, la de ahora no parece ser una ‘pulga’ feliz’ Y cuando sus pies no sonríen el balón se aleja. Quizás, esta vez también se le aleje el de color dorado.
DÓNDE Y CÓMO SE FABRICA
Messi, Ronaldo o Neuer recibirá el Balón de Oro el 12 de enero en Zúrich, que premia cada año al mejor futbolista del Mundo. La joyería Mellerio, situada en París, diseña desde 1956 el trofeo a mano. La tienda es conocida como la 'orfebrería de las reinas'.
"Este magnífico trofeo que nosotros elaboramos desde su institución necesita decenas de horas de trabajo. Numerosos artesanos se alternan en su confección: el orfebre, el repujador, el cincelador, el grabador, el dorador, el pulidor, etc., oficios todos ellos actualmente raros y preciosos. Estamos muy orgullosos de estar en el origen de este trofeo de leyenda", explica François Mellerio a propósito del Balón de Oro en la página Web oficial de la UEFA.
El balón de Oro esta compuesto por dos semiesferas de latón soldadas con un soplete por un orfebre, que además da forma a las costuras en el metal y graba el logotipo del FIFA Ballon d'Or. En la última etapa, la esfera se baña en oro fino antes de fijarse sobre un pedestal formado por un bloque de pirita. El trofeo, de 31 centímetros de alto, 23 de largo y 23 de ancho estaría finalizado a falta de la placa con el nombre del ganador.