El costarricense Hernán Medford cuenta con una brillante carrera futbolística, tanto en los últimos años desde el puesto de director técnico, como en el pasado cuando fue jugador activo.
Su vasto palmarés y recorrido internacional, sumados a una personalidad muy particular, le han permitido ser una figura preponderante en nuestro medio. Así, lo que ‘el Pelícano’ afirme siempre dará de qué hablar, y como él mismo sabe esto, es normal que haga alarde de sus experiencias… Prueba de ello fue la divertida salida que se le ocurrió en el programa VIS10N del exfutbolista Andrey Campos hace cinco años, cuando sin la más mínima modestia respondió que fue el famoso zaguero italiano Paolo Maldini el rival con quien más chispas sacó en un campo de fútbol.
Pues bien, hoy el estimable lector de everardoherrera.com conocerá otra historia con la que Medford puede sacar pecho; pero para ello primero hay que ubicarnos en junio de 1986.
En el icónico Estadio Azteca, y como parte de los cuartos de final de la Copa del Mundo México 86, Diego Armando Maradona exhibió ante Inglaterra una de las más apoteósicas presentaciones que recuerda la historia del máximo evento del planeta, para lo cual se valió primero de un ardid: abrió el marcador con un gol hecho con la mano; pícara astucia, opinan muchos, cínica deshonestidad, piensan otros… y en este último grupo siempre se encontró la principal víctima del hecho de marras, el arquero inglés Peter Shilton, quien jamás le perdonó la acción al 10 albiceleste.
Su enfado fue tal, que cuatro años después, cuando organizó el partido de su despedida oficial tras 24 años de carrera, decidió prescindir de la presencia de Maradona, al que sencillamente no invitó. ‘El Diego’, fiel a su estilo, afirmó en forma irónica en su autobiografía ‘Yo soy el Diego de la gente’: “El cabeza de termo se enojó porque yo le hice un gol con la mano. ¿Y el otro, Shilton, no lo viste? La cosa es que no me invitó a su partido despedida… ¡Mira como tiemblo!
¿Cuánta gente puede ir a la despedida de un arquero?, ¡de un arquero!”
Quien sí recibió una invitación formal fue Hernán Medford, al igual que Ronald González; ambos costarricenses, entonces jugadores del Dínamo Zagreb de Yugoslavia, viajaron a Londres en diciembre de 1990 y se sumaron a un combinado de futbolistas que tenía como base a figuras que habían actuado en el Mundial Italia 90: el colombiano Carlos Valderrama, el rumano Gheorghe Hagi, los cameruneses Thomas N'Kono y Roger Millá, el argentino Néstor Lorenzo, el belga Eric Gerets, los irlandeses Pat Bonner y Steve Staunton, además de los ticos. Como refuerzos, el francés Michel Platini, el yugoslavo Pedrag Mijatovic, el ‘che’ Osvaldo Ardiles, el hispano-marroquí Mohamed Nayim, el danés Kent Nielsen, el turco Cüneyt Tanman y el islandés Gudni Bergsson.
Medford iba a ser titular, pero… Como hecho anecdótico que el propio Hernán Medford contó alguna vez, en el juego de despedida del inglés Peter Shilton el tico iba a ser de la partida en un combinado dirigido nada menos que por el alemán Franz Beckenbauer, sin embargo él y Ronald González perdieron el transporte oficial que los trasladaría del hotel al Estadio White Hart Lane, por lo que llegarían cuando el germano ya había hecho el cambio obligado en la alineación. La transmisión de ‘Euro Sport’ incluso agregó el nombre de Medford en las formaciones.
En el cuadro de Shilton aparecieron ocho miembros del plantel inglés que había logrado el cuarto puesto en Italia 90: Terry Butcher, Des Walker, Bryan Robson, Paul Gascoigne, David Platt, Chris Waddle y Gary Lineker, además del homenajeado de la noche. Completaron el conjunto local dos experimentados como Kevin Keegan y Viv Anderson, así como algunos nuevos valores que años después trascenderían, entre ellos David Seaman y Matt Le Tissier.
Hernán Medford jugó completa la segunda mitad, mientras que González ingresó por Valderrama al 68’; poco pudieron hacer tanto ellos como sus compañeros del ‘Resto del Mundo’, pues fueron superados 4-0 por ‘la Selección de la Rosa’.
Pero el marcador es lo de menos; lo rescatable es que en aquel momento, hace ya 33 años, se tomó en cuenta a seleccionados costarricenses que habían brillado en Italia 90, para enviarlos al terreno de juego junto a algunos de los mejores futbolistas del orbe, en un ceremonioso espectáculo como lo fue la despedida del tres veces mundialista Peter Shilton. Y en el caso de Hernán, siempre podrá ‘rajar’ de que a él sí lo invitaron a jugar un importante duelo en el que Maradona no contó con la misma fortuna del desamparadeño. ¡Qué manera, Medford!
Medford con la crema y nata del fútbol mundial de los noventa. El público londinense fue testigo presencial de la participación de Hernán Medford en el partido de despedida del guardameta inglés Peter Shilton. La imagen recoge una acción en la que el tico presiona al volante de Inglaterra, Paul Gascoigne, ante la mirada del rumano Gheorghe Hagi.
*El autor es historiador de fútbol costarricense y responsable de la página de Facebook Gol de Camerino; pronto estará publicando el libro Nuestros primeros legionarios. Futbolistas ticos en el mundo 1875-1990.
