El ramonense, una vez retirado de la práctica profesional del fútbol, se incorporó a la Fedefutbol para trabajar como preparador de porteros, tarea que desarrolló durante muchísimos años y que le permitió ayudar a formar a varios arqueros ticos de trayectoria, siendo el pezeteño su mejor creación, pues el currículo deportivo de este así lo confirma: ha jugado tres copas del mundo (con 11 partidos es el guardameta centroamericano con mayor participación en el máximo evento), fue figura del Real Madrid, con el que ganó una liga española y tres ‘Champions League’, y hoy en el París Saint-Germain contabiliza dos ligas francesas, entre otros títulos más…
En el caso de Luis Gabelo, su enorme papel en aquel verano italiano le permitió disputar tres temporadas en España, para luego retornar al fútbol nacional y actuar con el CS Herediano y posteriormente con su querida AD Ramonense. Pareciera que no hay punto de comparación entre uno y otro, y que en este caso el pupilo superó a todas luces a su maestro… sin embargo, existe un curioso detalle en el que ‘se vuelca la tortilla’, como decimos popularmente en Costa Rica…
El Albacete Balompié es un modesto club de Castilla-La Mancha, al sureste del territorio español. Para mediados de 1990 acababa de campeonizar en la tercera división, por lo que se aprestaba a incursionar, por primera vez en sus 51 años de historia, en la segunda categoría de España. Con algo de fortuna, logró amarrar el fichaje del guardameta sorpresa del recién concluido Mundial; al ‘Conejo de la suerte de los ticos’ entonces le iba a tocar aportar a la causa albaceteña en ‘la Liga de Plata’...
Y es a partir de ese momento que iniciaría una relación casi legendaria entre Luis Gabelo y la fanaticada del ‘Alba’, pues durante los siguientes años el equipo iba a alcanzar las mejores participaciones de su historial. Primero, Conejo y compañía lograron el cetro y el consecuente ascenso en aquella campaña 1990-1991, saldados en la última fecha con victoria de 2-0 frente al Salamanca en el Estadio Carlos Belmonte, confirmando así una gran temporada en la que domingo a domingo el costarricense se había estado luciendo con grandes tapadas que valieron puntos a su club.
Rumbo a la máxima categoría. El Albacete Balompié acaba de vencer al Salamanca y por lo tanto consigue el ascenso a la primera división española; Luis Gabelo Conejo da las gracias al ‘Creador’, y Diario ABC recoge el momento.
Para el siguiente desafío, la edición 1991-1992 de ‘la Liga de las Estrellas’, el Albacete, bien custodiado en su portería por Conejo, se convertiría en la revelación del certamen. Ante delanteros estrellas como Hristo Stoichkov, Iván Zamorano, Emilio Butragueño, Davor Suker, Anton Polster, ‘Polillita’ da Silva, Rommel Fernández, Marius Lacatus, Paulo Futre y Juan Antonio Pizzi, el costarricense libró muchos duelos que también sumaron puntos para su oncena, por lo menos más de los que al inicio se había presupuestado el ‘Alba’, tanto que al finalizar la temporada el equipo se ubicó en una honrosa sétima posición, a un punto de clasificar a la Copa UEFA -hoy Europa League-. Si el mundo futbolístico había visto en Alemania 74 a la famosa ‘Naranja Mecánica’ holandesa, toda España admiró entre 1991 y 1992 al ‘Queso Mecánico’ albaceteño, mote con el que se le conoció a aquella escuadra de Gabelo, en clara alusión al lácteo consumido en tierras manchegas, mencionado incluso en la obra Don Quijote de la Mancha.
El Queso Mecánico que se ganó el respeto de España. El Albacete cumplió una gran temporada de estreno en la primera división española, e incluso estuvo a nada de meterse en la antigua Copa UEFA; el costarricense Gabelo Conejo fue el gendarme de su portería.
A veces el destino se encarga de mover todo a favor de algún elegido, por lo que sin entender cómo, de repente está en el momento y el lugar justo… Eso sucedió con el tico, quien posiblemente antes de Italia 90 jamás había imaginado convertirse en ídolo de toda una ciudad. Y como si no fueran suficientes méritos para ganarse el corazón de la gente en Albacete, un año después Luis Gabelo Conejo, estando ya retirado, decidió volver al fútbol para viajar nuevamente a España y ayudar a su exequipo, que adoleciendo la baja por lesión de su arquero titular Juan Carlos Balaguer, requería suplirlo con alguien experimentado en el puesto, con el agravante de que ya andaba rondando el fantasma del descenso, pues en la última campaña debieron disputar con el Mallorca una serie por la promoción que con mucha dificultad apenas se superó…
Y va de nuevo… Luis Gabelo, a la derecha, dejó atrás el retiro y se volvió a poner los guantes para ayudar al Albacete de cara a la temporada 93-94 de la primera división española.
El ídolo centroamericano del Albacete aportó su “granito de arena” y atajó en los primeros 12 encuentros, destacándose especialmente su actuación en la fecha 2 ante el ‘Barça’, juego que terminó con empate a cero; ese mismo marcador se dio un mes después frente al Deportivo La Coruña. Valga destacar que en sendos juegos el ‘moncheño’ se las vio con Romario y Bebeto; ninguno de los dos artilleros, titularísimos con la selección brasileña que al año siguiente se coronaría tetracampeona mundial, pudo marcarle gol a Gabelo…
Gabelo entre los favoritos en encuesta albaceteña. Para abril de 2020 habían pasado 27 años desde la última aparición de Luis Gabelo Conejo como arquero del Albacete, y sin embargo la afición lo sigue recordando como el gran ídolo que fue, tal como lo dio a conocer el club a través de sus redes sociales.
En 2010, gracias a recomendaciones que el propio Conejo le brindó a la administración del Albacete Balompié, se incorporó Keylor Navas a su plantel para iniciar su fructífero transitar por el ‘Viejo Mundo’. Con el ‘Alba’, entonces en la segunda división española, muy pronto demostró que tenía el nivel suficiente para dar el salto a la máxima categoría, razón por la cual era habitual la presencia de visores de clubes de primera en las gradas del Carlos Belmonte siguiendo de cerca las actuaciones del joven centroamericano. Si bien aquella temporada 2010-2011 individualmente fue de gran provecho para Navas (nominado a mejor guardameta del torneo), colectivamente fue para el olvido, pues al final el equipo ocupó la última posición y descendió a tercera división. Así, el tico hizo valer una cláusula de su contrato que obligaba al Albacete a venderlo si se concretaba el descenso de categoría, por lo que el Levante de la división de honor se convirtió en su siguiente club y escalón inmediato al éxito que posteriormente alcanzaría.
Así las cosas, en Albacete recuerdan el paso de Keylor por sus filas, y seguramente allá saben que ha sido el cancerbero con mejores condiciones que han tenido, pero aun así es Gabelo, su mentor, quien se ganó el título de ídolo, y es justo ese detalle en el que el discípulo no pudo superar a su maestro… ¿Que eso vale más que tres Champions? Para la gente de Albacete sí.
*El autor es historiador de fútbol costarricense y responsable de la página de Facebook Gol de Camerino; pronto estará publicando el libro Nuestros primeros legionarios. Futbolistas ticos en el mundo 1875-1990.
