En Bolivia se dio el puntapié inicial a la Copa Sudamericana. Nacional Potosí, dirigido por el tico Jeaustin Campos, fue el primer equipo boliviano que se presentó en el segundo torneo más importante del continente.
El estadio Víctor Agustín Ugarte acogió una noche para el olvido del equipo de Campos, que cayó por 0 a 2 ante Melgar de Perú.
El elenco de la banda roja tuvo la mejor oportunidad del encuentro con un tiro penal a sólo tres minutos de iniciadas las acciones. El disparo de Mauro Bustamante fue bastante anunciado hacia el centro, donde el arquero Carlos Cáceda colocó el cuerpo y en el rebote el remate de Paolo Jiménez fue contenido por el guardameta.
En cuestión de minutos, Nacional Potosí estaba abajo en el marcador, porque el primer tanto del cotejo llegó a los 5´ con la definición de Joel Sánchez, quien con un remate diagonal abajo venció a Jimmy Roca, después de recibir la habilitación de un compañero con una defensa que recibió el ataque en una mala ubicación.
Estos golpes prematuros dejaron una marca imborrable en el cuadro de la Villa Imperial, cuya desesperación fue percibida en el campo y eso fue transferido al fútbol de los dirigidos por el entrenador Jeaustin Campos.
En su afán por dar con el empate, el local quedó con la defensa descubierta y Melgar tuvo la ocasión de ampliar la cuenta en el primer tiempo con llegadas de Othoniel Arce que exigió a Roca. El delantero peruano junto a Sánchez y Emanuel Amoroso desarmaron la última línea de Campos.
La imagen siguió siendo la misma en el complemento con la facilidad de Melgar para llegar sobre el pórtico contrario. A este ritmo, el 2-0 llegó a los 68 minutos con una habilitación de Amoroso para Arce, quien bajó la pelota con el pecho y resolvió con un zurdazo abajo a una esquina del guardameta.
Si el Nacional Potosí quiere seguir en carrera, deberá ganar por al menos dos goles de diferencia en Perú. La revancha está programada para el 18 de febrero en la ciudad de Arequipa.