Una vez finalizado el duelo entre el Real Madrid y el Sevilla que culminó 2-2, Zinedine Zidane se dirigió al árbitro, Munuera Montero, para pedir explicaciones por un penal que dará mucho que hablar.
El francés aparentó mucha tranquilidad pero por dentro estaba muy enfadado.
Minutos después del final, Zidane compareció ante los micrófonos de Movistar y desveló sus sentimientos. "Sí, sí, estoy muy enfadado", comenzó. "Me tienen que explicar las reglas de las manos", prosiguió.
Durante las últimas semana, el técnico del Real Madrid había repetido que nunca habla de los árbitros pero las manos de Militao parece que le han cambiado el guión: "No me gusta hablar de los árbitros pero he hablado con el árbitro y me ha dicho que ha ido a ver la jugada al VAR y que era penalti". Eso sí, después fue muy rotundo: "No me sirven sus explicaciones".
El enfado de Zidane no acabó ahí. "Si hay manos las pitas en los dos lados pero la de Jordán no la mira. Hoy podemos estar molestos", subrayó.
Disputa por el trofeo en el último tramo
"Antes del partido dependíamos, ahora no. Vamos a seguir e intentar ganar los tres partidos porque no hay más remedio. Nosotros tenemos que sumar y veremos lo que hace el Atlético y Barcelona".
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