Liga Deportiva Alajuelense no solo ganó 2-0 el domingo ante Sporting: firmó una jugada que merece quedar guardada como una de las mejores secuencias colectivas del torneo.
Fue al minuto 27 del primer tiempo en el estadio Alejandro Morera Soto , cuando el partido aún pedía claridad, velocidad y precisión. Y la Liga respondió con una acción de laboratorio, ejecutada con una sincronía que dejó sin respuestas al rival.
Todo comenzó desde atrás, con la serenidad de un equipo que trabaja la pelota con sentido. El portero uruguayo Washington Ortega inició la acción con un saque limpio hacia Celso Borges, quien de inmediato conectó en corto con Joel Campbell. Campbell, con jerarquía , aguantó de espaldas, esperó el momento justo y cedió para el colombiano Jeison Lucumí, que arrancó desde mediocampo con potencia y cabeza levantada.
Lucumí avanzó rompiendo líneas, llevando al Sporting hacia atrás, obligándolo a retroceder sin encontrar cómo presionar ni cómo cortar la transición. Ya entrando en el último cuarto de cancha, el colombiano filtró un pase perfecto hacia el mexicano Ronaldo Cisneros, quien recibió en el área con frialdad quirúrgica. Ahí vino la estocada: un recorte elegante sobre Giancarlo González que dejó al defensor completamente fuera de la acción. Acto seguido, un remate colocado, cruzado y certero para vencer al guardameta Moreira.
Fue la definición de una jugada perfecta.
Un gol que recorrió todo el campo en combinaciones fluidas, con pases verticales, movimientos coordinados y lectura de juego de altísimo nivel. Una maniobra que cualquier futbolero aplaude .
En una noche donde Sporting evidenció enormes problemas para terminar jugadas, la Liga mostró lo contrario: claridad total en la idea, ejecución limpia y una capacidad notable para transformar una salida desde el portero en un gol de clase.


