Después de la eliminación mundialista de las todas las selecciones de fútbol de Centroamérica con la excepción de Panamá, ha vuelto al debate el problema de la falta de estructura deportiva.
Con dirigentes enfocados más en conseguir puestos de importancia en Concacaf, se ha dejado de lado el futbol menor. Sin una base sólida, cualquier intento de competir en el ámbito internacional se convierte en una ilusión.
Centroamérica, con su pasión por el fútbol, enfrenta el reto de transformar esa energía en estructuras que produzcan talento competitivo. Para ello, es útil estudiar dos modelos contrastantes pero exitosos: Panamá un vecino que no hace mucho era el menos futbolero de la región, Uruguay, un país pequeño con resultados históricos, y Estados Unidos, una nación que ha crecido exponencialmente en el deporte gracias a planificación e inversión.
Pero ¿qué es una estructura de futbol menor? es estructura de divisiones inferiores, es el sistema jerárquico de equipos y categorías que organizan y desarrollan a los jugadores jóvenes desde la etapa formativa hasta llegar a los equipos profesionales.
Este análisis lo he basado en estructuras que se han establecido en la industria porcina de los EE. UU desde el punto de vista gerencial para desarrollar talento constante para la sostenibilidad del negocio, pero que aplican a muchas áreas incluidas el fútbol.
1. Panamá: una planificación que se respalda con resultados
¡Si! estamos hablando de Panamá, quienes hace 30 años los mirábamos triunfar en boxeo o béisbol, pero ahora han logrado ejecutar en las canchas lo que planifican en el papel. ¿Cómo lo han hecho?
Este es solo un ejemplo: a inicios del 2025 se realizó el Congreso Extraordinario 2025 de la Federación Panameña de Fútbol (FPF):
Una planificación que no se queda archivada en ninguna parte y está basada en tres columnas vertebrales: Desarrollo, Institucional y Deportivo.
-Desarrollo: la construcción del Centro de Alto Rendimiento (CAR) y en la implementación del plan de mantenimiento para todas las infraestructuras.
-Institucional: fortalecer la transparencia y la buena gobernanza dentro de la Federación, y en el continuo impulso de la formación integral de entrenadores, árbitros, comisarios, administradores, dirigentes y jugadores
que conforman la familia del fútbol panameño.
-Deportivo: el fortalecimiento y desarrollo del plan estratégico del Fútbol Femenino, como en la implementación de manera sólida del Programa de Detección de Talento (TDS), entre otros planes.
Exposición internacional de las selecciones menores y acompañada con buenos resultados:
-Entre los logros deportivos alcanzados en el año 2024 se mencionaron la clasificación de la Selección Masculina Sub-20 a la Copa Mundial Sub-20 de la FIFA Chile 2025, previamente en 2023 Panamá ganó el título Maurice Revello derrotando a la selección de México con un 4-1 en la final .
-En la Selección Mayor Masculina, se resaltó la clasificación por tercera ocasión consecutiva al Final Four de la Liga de Naciones 2025, en Los Ángeles, y el boleto obtenido de manera directa a la próxima Copa Oro 2025.
-Mientras que en la parte del Fútbol Aficionado se hizo hincapié en el desarrollo de la cuarta edición del Campeonato Infanto Juvenil en su rama femenina y masculina para las categorías Sub-14 y Sub-16, que continúan siendo un éxito a nivel nacional.
Un trabajo integral con todas las áreas que integran el futbol y federativos que realmente trabajan, algo que no se ve en las federaciones de Costa Rica y Honduras, por ejemplo.
En este congreso se presentó el nuevo escudo de la Federación Panameña de Fútbol y toda la evolución que viene teniendo la marca FPF.
En cuanto a las Selecciones Femeninas se apuntó a la designación de la nueva entrenadora de la Selección Mayor Femenina.
En cuanto al arbitraje, se refirió a la participación de mundialista de los silbantes panameños en la pasada Copa Mundial de Futsal de la FIFA
Uzbekistán 2024 y la Copa Mundial de Fútbol Playa de la FIFA Emiratos Árabes Unidos 2024.
Se entregaron más de 2,300 licencias para entrenadores a nivel nacional, así como la realización de un total de ocho Festivales de Fútbol Femenino para niñas en diferentes provincias.
Resultados: Ya los sabemos para que ponerle más sal a la herida.
2. Uruguay: eficiencia y formación integral
Uruguay, con apenas 3,5 millones de habitantes, ha logrado mantener una presencia
constante en mundiales y competencias internacionales. ¿Cómo lo sostiene?:
Programa “Gol al futuro”: promovida por la Secretaria Nacional del Deporte que inicio en 2010 con 1.400 futbolistas juveniles en categorías Sub-14 a Sub-19, incluyendo fútbol femenino. Ahora con 3500 participantes integra educación, salud y deporte, logrando que el 96% de los jugadores permanezcan en el sistema educativo, frente al 50% en 2009.
Clubes con divisiones juveniles estructuradas: Nacional y Peñarol, entre otros, cuentan con entrenadores certificados y metodologías estandarizadas. Contando con ciudades deportivas y con las siguientes categorías: Sub-19, Sub-17, Sub-16, Sub-15, Sub-14, más Tercera División (reserva).
Academias privadas: instituciones como Defensor Sporting y Zona Prado ofrecen programas desde los 6 años, combinando técnica, táctica, nutrición y psicología. Estas academias ejecutan su formación en un ambiente familiar y distendido, buscando desarrollar habilidades básicas y pasión por el fútbol. Además, trabajan
con microciclos estructurados, entrenamientos con pelota, fuerza en gimnasio y video análisis. Formación técnica desde edades tempranas y desarrollo táctico como toma de decisiones bajo presión y buscando mantener continuidad entre juveniles y Primera División, aplicando la misma línea de juego.
Resultados: Uruguay exporta jugadores a ligas europeas y mantiene competitividad internacional sin depender de una gran población.
3. Estados Unidos: Escala, infraestructura y ciencia
Estados Unidos ha pasado de ser un acompañante a un protagonista en las copas del mundo, a través de la masificación del futbol. Aquí en Missouri, tengo la oportunidad de trabajar de cerca con la Sporting Columbia Academy, una afiliada al club de la Major League Soccer (MLS) Sporting Kansas City.
Con manuales estandarizados y diseminados por la US soccer, para desarrollar talento, comportamiento efectivo del entrenador, manejo del equipo durante la competencia e inclusive manejo de riesgos durante los entrenamientos o los juegos entre otros. Esto resalta la importancia de un lineamiento para la adquisición de conocimientos y un trabajo unificado para lograr los resultados esperados.
En principio se enfocan en que los niños disfruten del futbol como tal y luego a partir de los 10 años se centran en cuestiones básicas como conducciones en espacio reducido y abierto, control orientado y en entrenamientos de 5x5, 6x6 y 7x7 niños. Aquí se enfatizan las tres fases principales del fútbol son las fases de posesión (ataque), sin posesión (defensa), y las transiciones (de ataque a defensa y de defensa a ataque), según se analizan por el estado del balón, pero lo más importante: recuperar el balón lo más pronto posible a través de la intensidad en la marca del oponente.
US Youth Soccer: agrupa a 3,2 millones de jugadores entre 5 y 19 años, apoyados 55 asociaciones estatales y contando con 500.000 voluntarios y 300.000 entrenadores certificados.
MLS NEXT: 2.189 equipos y 273 clubes con 43.000 jugadores y 28.000 partidos, funcionando como puente hacia el profesionalismo.
Academias de élite: Philadelphia Union Academy y New England Academy combinan educación académica con entrenamiento de alto rendimiento, utilizando tecnología para análisis físico y táctico.
Resultados: Crecimiento sostenido en la MLS, exportación de jugadores a Europa a edades
tempranas y mayor competitividad en selecciones nacionales.
Diagnóstico de Centroamérica
Un análisis usado en el ámbito de la agricultura llamado FODA muestra lo siguiente:
Fortalezas: talento natural, pasión por el fútbol, tradición cultural. Gran número de canchas como existen en Costa Rica.
Debilidades: falta de infraestructura, escasa capacitación técnica, ausencia de programas integrales. Además, del poco interés de sus dirigentes por desarrollar el futbol menor.
Oportunidades: alianzas público-privadas, cooperación internacional, uso de tecnología accesible.
Amenazas: migración de talento sin retorno, falta de inversión estatal, corrupción en federaciones.
Estrategia recomendada
1. Crear un sistema nacional de fútbol menor con ligas infantiles y juveniles articuladas. así como un torneo de reservas como lo hacen los equipos de Sudamérica y Europa.
2. Capacitar entrenadores en técnica, pedagogía, análisis de estadísticas y psicología deportiva.
3. Integrar educación y salud en los programas formativos.
4. Invertir en infraestructura comunitaria: canchas seguras, iluminación, equipamiento básico. Comenzando en áreas que se consideran semilleros de jugadores como Limón en Costa Rica o Puerto Cortés y La Ceiba en Honduras.
5. Implementar tecnología accesible: análisis de video, plataformas de seguimiento de rendimiento.
6. Fomentar alianzas público-privadas para financiar academias y torneos.
7. Establecer convenios con universidades para becas deportivas.
Conclusión
Panamá y Uruguay demuestran que la organización y la formación integral pueden compensar limitaciones demográficas, mientras que Estados Unidos evidencia cómo la inversión en infraestructura y ciencia acelera el desarrollo. Centroamérica tiene la oportunidad de diseñar un modelo híbrido que combine el fuerte trabajo de los directivos panameños, la eficiencia uruguaya con innovación estadounidense, asegurando así un futuro competitivo para el fútbol regional.
Nota escrita por Magdiel López Soriano


