El síntoma es bien popular entre los enfermos crónicos, pero fue a partir de la epidemia de covid cuando se extendió.
La niebla mental es la incapacidad de pensar con claridad, al levantarse sentir que le falta tomarse diez tazas de café porque no se acuerdan del nombre de las cosas. Son esos momentos en que el cerebro se nubla y no sabe cual es la realidad.
Para quienes creen no tener niebla mental, es porque todo va tan rápido que no saben cómo remediar la debacle y siguen imponiendo y recordando el pasado, ya sea el colonial, el nacional o el personal, para justificarse con ellos mismos.
El futbol nacional es de estadios vacíos por su baja calidad. La afición no encuentra nada interesante que la cautive. Según una encuesta realizada por la Universidad de Costa Rica es tan pobre el espectáculo que ofrecen los equipos, que solo el 39% les sigue gustando el futbol. De ese 39% Saprissa y Alajuelense tiene la mayoría de hinchas mientras el resto de equipos son ignorados.
Herediano, San Carlos, Cartaginés, Liberia, Puntarenas, Santos, Santa Ana o Guanacasteca no encantan a su afición.
Pésimas canchas, incómodas graderías, falta de competitividad, saber cuáles equipos serán los que clasifiquen a las semifinales antes de iniciar el siguiente campeonato, son solo algunos de los síntomas colaterales, porque lo peor es el nivel futbolístico de los equipos.
Saprissa vence a Alajuelense, líder del certamen, y el siguiente partido de la Liga frente a Sporting, el estadio con unos cuantos fanáticos liguistas llenos de niebla mental buscan empujar a su equipo a la debacle mediante improperios hacia los jugadores.
Herediano juega contra Pérez Zeledón donde solo asistieron los familiares de los jugadores y algunos aficionados florenses, que estoicamente soportaron el futbol de pacotilla que juega su equipo.
Saprissa después de ganar el clásico pudo llenar el estadio en Pérez Zeledón.
Así podemos seguir describiendo el nivel de nuestro futbol que es poco atractivo.
Faltan jugadores de calidad. Falta una selección nacional de calidad y los pocos jugadores buenos que hay en el país son puestos al margen. Sobran dirigentes que como pulpos deben sacar sus intereses del futbol.
Cuando un dirigente maneja el futbol nacional desde la Federación, la UNAFUT, es Presidente de su equipo, Director Deportivo, Director General, Entrenador, y presionador de los árbitros. ¿Creemos que es ventajoso para el futbol nacional?
El realizar multitareas (Multi Task) por un solo dirigente, aunque puede parecer eficiente, conlleva desventajas a nivel cognitivo y emocional. Por ejemplo disminuye la productividad, se incrementan los errores cuando se requiere precisión, hay una fatiga mental lo que desemboca en un agotamiento cognitivo, existe un aumento en la ansiedad y el estrés, afecta la creatividad y se reduce la calidad del trabajo por falta de control emocional.
Sin embargo, es tan grande ese pulpo en la organización del futbol, que los presidentes de los otros equipos se desentienden y siguen tomándose la quinta taza de café buscando salir de esa niebla mental.
Los equipos del fútbol nacional perdieron adeptos. Ya no los emociona. Ya no disfrutan. No los cautiva. No hay jugadores de calidad. No hay ídolos. Hay tantos problemas de organización y falta de liderazgo en los dirigentes que el aficionado se refugió en otras actividades.
¿Qué sucederá cuando ya no estén en la cancha Celso Borges, Mariano Torres o Elías Aguilar que le están ofreciendo al aficionado el último sorbo de la taza de café?
*Máster en Comunicación. Lic. en Periodismo. Lic. en Educación Física. Entrenador de futbol y baloncesto