En diálogo con el medio argentino ‘La Nación’, Mauricio D’Alessandro, abogado de Matías Morla, entonces representante de Maradona, cuenta que tomaron conocimiento de la propiedad el año pasado después de recibir un llamado de Tony Castro, el hijo de Fidel.
“Lo llamó a Matías por la casa en Cuba, pero ahí hubo toda una mezcolanza porque en algún momento todos hablaban de la casa de Miramar, pero el médico que la cuidaba la ubica en La Pradera. La casa quedaba en el mismo complejo”, dijo.