Wallace tiene 33 años de edad y trabaja como comentarista deportivo. Se tuvo que retirar del fútbol de forma prematura tras someterse a una operación en ambas caderas.
''En Costa Rica el repechaje es tratado como una cuestión de vida o muerte por parte de jugadores y aficionados. Define la trayectoria de los próximos años y, en última instancia, determinará el nivel de felicidad de toda la nación. Recuerde, Costa Rica es la tierra de "Pura Vida", tierra de "flora y fauna", y la tierra donde a la gente humilde y trabajadora le gusta tomar su café y hablar de fútbol durante horas y horas'', expresó el ex volante en su nota.
''Los jugadores convocados para vestir esas históricas camisetas rojas tienen la oportunidad única de llevar a Costa Rica a una tercera aparición consecutiva en la Copa del Mundo. Y es realmente un privilegio usar esos colores. También es una gran responsabilidad. Aprendí esto desde el primer día cuando me dijo un ex compañero de equipo y buen amigo Álvaro Saborio, un veterano delantero del Real Salt Lake: "Esta camiseta no es para todos, así que si no estás listo para defender estos colores, por favor dámela" a alguien que está dispuesto a morir por la patria'', agregó.
A lo largo de su carrera Rodney jugó para cuatro clubes diferentes de la MLS entre el 2008 y 2019, registrando 24 goles y 29 asistencias en 204 partidos de temporada regular con Portland Timbers , DC United , New York City FC y Sporting Kansas City . Ganó la Copa MLS 2015 con Portland y fue internacional 31 veces con Costa Rica. Formó parte del equipo que participó en el Mundial de Rusia 2018.
También militó en la Liga de Portugal y de Brasil con el Arouca y Sport Recife respectivamente.
Aquí la nota completa de Wallace en la MLS
Es hora de “El Repechaje” para Costa Rica. Un partido que es, en esencia, el más intenso de los partidos de playoffs. Es el tipo de situación que no tarda una semana en decidirse. No hay una segunda ronda, y no hay absolutamente ningún año que viene.
El martes, Costa Rica se enfrentará a Nueva Zelanda para decidir el equipo final que clasificará a la Copa del Mundo de Qatar 2022. Será mejor que creas que todo el país se detendrá por este, un encuentro donde el ganador se lo lleva todo en Qatar entre el equipo en cuarto lugar de Concacaf y el ganador de Oceanía.
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El Repechaje
En mi país de origen, Costa Rica, “El Repechaje” es tratado como una cuestión de vida o muerte por parte de jugadores y aficionados. Define la trayectoria de los próximos años y, en última instancia, determinará el nivel de felicidad de toda la nación. Recuerde, Costa Rica es la tierra de "Pura Vida", tierra de "flora y fauna", y la tierra donde a la gente humilde y trabajadora le gusta tomar su café y hablar de fútbol durante horas y horas.
Los jugadores convocados para vestir esas históricas camisetas rojas tienen la oportunidad única de llevar a Costa Rica a una tercera aparición consecutiva en la Copa del Mundo. Y es realmente un privilegio usar esos colores. También es una gran responsabilidad. Aprendí esto desde el primer día cuando me dijo un ex compañero de equipo y buen amigo Álvaro Saborio, un veterano delantero del Real Salt Lake: "Esta camiseta no es para todos, así que si no estás listo para defender estos colores, por favor dámela" a alguien que está dispuesto a morir por la patria”.
Ni siquiera me sorprendió la declaración. Había cultivado esos sentimientos desde una edad temprana al crecer idolatrando a grandes como Paulo Wanchope, Hernan Medford, Ronald Gomez y Harold Wallace. A lo largo del resto de mi carrera, viví esas famosas palabras.
Este peso del equipo ocurría cada vez que aterrizaba en San José, reportándome para el campamento. Hay algo indescriptible en llegar a Costa Rica, sentir el calor en la cara mientras caminas por el túnel hasta las puertas. El momento del círculo completo se produjo unos 20 minutos antes de nuestro primer partido de la Copa Mundial 2018 contra Serbia, que coincidió con mi cumpleaños número 30. Todo por lo que había trabajado dentro del fútbol se había reducido a este momento. Cuando comenzó a sonar el himno nacional de Costa Rica, no pude contener las lágrimas de alegría, eso es lo que significa, especialmente en el escenario de la Copa del Mundo.
Respeto Concacaf
A medida que se acerca este partido masivo de ganar o irse a casa, también vale la pena señalar que es un juego importante para la región.
Para decirlo claramente: Concacaf no recibe suficiente respeto en el escenario mundial. Eso es solo un hecho y esta es la razón por la que está sucediendo: Concacaf todavía está trabajando para descubrir quién es el mejor entre sus naciones. Cuando toda la atención se pone solo en los equipos nacionales que aportan más ingresos a la región, y cuando el enfoque se basa en destacar solo a los jugadores que representan grandes contrataciones durante una ventana de transferencia, entonces el crecimiento de Concacaf siempre será tocar un techo. Necesitamos aprender unos de otros.
No hay suficiente énfasis y apoyo para todos los países que forman parte de Concacaf. Cada nación de esta región tiene su propio conjunto independiente de creencias y filosofías sobre el tipo de fútbol que se debe jugar. Y eso está bien, pero ¿por qué no crear un entorno en el que los países con menos recursos puedan ver desde dentro lo que funciona para México? ¿Qué ha estado funcionando para US Soccer? Y sí, incluiré a Costa Rica en los países para aprender porque estamos a punto de clasificar a nuestra tercera Copa del Mundo consecutiva y eso no es fácil.
Concacaf no tiene los mismos recursos que las naciones europeas ni la misma estructura que Conmebol. Cuando veo los partidos de clasificación en Sudamérica, veo dos equipos que están parejos en su mayor parte. En cualquier momento Venezuela puede enfrentarse cara a cara con Argentina, y un equipo como Perú puede ir a Brasil y sacar un resultado. Tener estructura funciona y tener filosofías de entrenamiento similares entre países funciona.
En la región europea, los clubes siguen una forma similar de jugar, los entrenadores reciben formación sobre cómo preparar adecuadamente a los jóvenes. Tienen una hoja de ruta sobre cómo llegar al más alto nivel internacional desde el comienzo de la carrera del club de un jugador joven hasta que alcanza las filas profesionales. El entrenamiento es de élite, el plan se establece desde una etapa temprana y todo en lo que tienen que concentrarse es en atarse las botas, jugar bajo un sistema determinado y comprender individualmente el estilo de juego para lograr el más alto nivel de competencia.
Las ligas nacionales son otra razón por la cual Concacaf aún no es tan respetada como otras regiones. Países como Surinam, Bermudas, Guatemala y Martinica se encuentran entre las naciones de Concacaf de las que no podemos escuchar ni sentir mucho porque el desarrollo de base no está allí. En este momento, los países más pequeños de la región confían en la nacionalización de jugadores que quieren una oportunidad en el juego internacional para aumentar su stock individual. Pero no debería detenerse allí. Necesitamos hacer un mejor trabajo colectivamente en la implementación de un sistema de entrenamiento para cerrar la brecha entre cada uno de los países en Concacaf. Tenemos que trabajar juntos y aprender unos de otros.
Personalmente, he visto un crecimiento en Concacaf desde 2009 cuando comencé mi carrera. ¿Estamos avanzando? Sí somos. ¿Nos estamos moviendo con un propósito en mente? No estoy seguro de eso todavía. Lo que podemos sacar de no obtener suficiente reconocimiento a nivel mundial es que es necesario que ocurra un cambio. Estructura colectiva, conciencia futbolística dentro de las regiones, tocar todos los rincones del continente y llegar a esas comunidades. Dar a los jóvenes un camino claro e igualitario para llegar a la cima es fundamental. Lo que Concacaf necesita es simple: más educación futbolística en el nivel superior, una mejor idea de los estilos de juego y la filosofía, menos rotación de entrenadores para los jóvenes y una oportunidad justa de reconocimiento contribuirá en gran medida a convertir a Concacaf en lo que conocemos. puede llegar a ser.
Ahora es el tiempo
Costa Rica ahora tiene otra oportunidad de representar a la región en el escenario más grande. Es necesario analizar y compartir en toda la región cómo siguen logrando llegar allí. Con todo lo dicho, ¡vamos Ticos! Espero que toda la región esté apoyando a otro país de Concacaf en la Copa del Mundo el martes, uniéndose a EE. UU., Canadá y México, de esa manera todos podemos comer en la misma mesa. Le espera un puesto en el Grupo E junto a Alemania, Japón y España.
¡Pura Vida, mi gente!
Escrito por Rodney Wallace al sitio oficial de la MLS
