La Federación Costarricense de Futbol tomó esta decisión tras la alerta emitida por el Gobierno de la República a raíz del brote de coronavirus COVID-19. El objetivo de la medida es evitar aglomeraciones de personas y limitar la propagación de la enfermedad.
También se está valorando la opción de trasladar ambos partidos a otras sedes. Originalmente, Costa Rica-Panamá en masculino está programado en el Estadio José Rafael “Fello” Meza de Cartago, y Costa Rica-Brasil (femenino) en el Estadio Nacional. Sin embargo, jugar a puerta cerrada implica una logística especial y por ello, es posible que se designen nuevos escenarios para ambos compromisos, lo cual será comunicado próximamente.
Cabe recordar que todavía no se habían puesto a la venta las entradas para estos dos partidos.
La Fedefútbol decidió continuar con la programación de los juegos -aún asumiendo costos fijos que no se podrán compensar vía taquilla- en el mejor interés deportivo de mantener el ritmo de actividad de las Selecciones Nacionales.
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