La Selección Argentina logró un vital triunfo por 2-0 ante México por el Grupo C del Mundial de Qatar 2022 y el responsable de abrir el marcador y desatar la euforia de los argentinos presentes en Lusail fue Lionel Messi.
Al terminar el partido, la Pulga celebró la victoria y no ocultó el hecho que también fue un desahogo para los jugadores: "Había que ganar para acomodarnos. Ahora ha comenzado otro Mundial".
"Era un partido muy complicado para levantarnos porque México juega bien, tiene un gran técnico y te maneja la pelota. El primer tiempo lo jugamos como teníamos que jugarlo, con mucha intensidad. Y en el segundo, cuando nos calmamos y empezamos a mover la pelota hasta el gol, volvimos a ser lo que somos nosotros. Había que ganar para acomodarnos", reflexionó el capitán de la Albiceleste al finalizar el encuentro.
Lo cierto es que esta última oración fue la clave de las declaraciones del crack rosarino, quien confesó que dentro del plantel sabían de lo importante del encuentro y de la presión que los rodeaba: "Sabíamos que hoy había que ganar, que arrancaba otro Mundial para nosotros y lo pudimos hacer".
El triunfo fue también un desahogo para los jugadores y así lo dejó en claro Messi, quien además dejó una contundente reflexión: "Desde hoy ha comenzado otro Mundial porque sabíamos que ganando los dos partidos podíamos clasificar. Dimos un paso importante pero somos conscientes que nos queda otro para conseguir el primer objetivo".
"No podemos bajar los brazos ahora. Nosotros nos pusimos así, tenemos todas finales, no podemos errar y la respuesta de la gente sabíamos que iba a ser así. Nosotros les cumplimos, llevamos mucho tiempo juntos y de la mano es mejor, se consiguieron muchas cosas lindas", cerró.