Se disputó una versión más del clásico nacional, y como siempre sucede en el más candente encuentro del fútbol costarricense, dejó mucho para analizar y discutir, como el regreso de la llamada ‘Saprihora’, la polémica arbitral -que con todo y el VAR sigue siendo un tema sin solución-, así como la participación de nuevas figuras que inscribieron su nombre en los registros históricos; entre estos últimos estuvieron tres jugadores extranjeros: el guardameta uruguayo de LD Alajuelense, Washington Ortega, mientras que en las filas moradas, el volante ofensivo argentino Nicolás Delgadillo y el delantero español Sabin Merino.
Sobre Merino, de quien se espera tome la batuta que en su momento lució el goleador jamaiquino Javon East, se puede afirmar que cumplió con las expectativas, por lo menos es la impresión que dejó en los parciales tibaseños. En los próximos partidos se podrá apreciar el verdadero nivel de un futbolista que a sus 33 años de edad cuenta en sus números estadísticos con 62 juegos en la primera división ibérica.
Y es a propósito de su paso por ‘la liga de las estrellas’, que quise compartir con el estimable lector de everardoherrera.com la ocasión en que la nueva figura saprissista le anotó un trascendental gol a Keylor Navas, jugando ambos para el Athletic de Bilbao y el Real Madrid, respectivamente. Si bien se trata de una historia que algunos medios recordaron el mes pasado cuando los morados contrataron a Sabin, es necesario acotar que para el presente texto preferí profundizar más… Por eso, en las siguientes líneas vamos a conocer pormenores de dos realidades que aunque diferentes, tuvieron como factor común el objetivo de demostrar condiciones en una de las mejores competiciones del balompié mundial.
Uno es delantero y el otro, arquero. Uno busca la mayor satisfacción del fútbol, el otro intenta evitarla. Sabin Merino es artillero español, mientras que Keylor Navas es portero costarricense. Sus nacionalidades y los equipos para los que actuaban en setiembre de 2015, decían mucho sobre el reto que significaba presentarse a la gramilla del nuevo Estadio de San Mamés aquella noche de miércoles. El europeo, a sus 23 años de edad, jugaba su temporada de estreno en la máxima categoría; en el caso del centroamericano, más experimentado, con 28 años disputaba su quinta campaña en primera (la segunda para el Real, pero la primera como titular).
¿Presión? Sí la había. Para Merino era apenas su cuarto compromiso en la ofensiva del Athletic, con el que había sido titular ante el Barcelona y el Villarreal, y había jugado el segundo tiempo frente al Eibar. Contra el Madrid volvía a ser de la partida en el esquema de Ernesto Valverde, y soñaba con anotar su primera diana en aquel torneo. Marcarle a los de Chamartín no era poca cosa, y si encima existía la posibilidad de romper la imbatibilidad que en ese momento ostentaba Navas, ¡pues aun mejor!
Las dos caras de la moneda. Dos imágenes de un gol del que hace diez años se habló mucho en España; a la izquierda, Sabin Merino se lanza de palomita para vencer a Keylor Navas; a la distancia siguen la acción Luka Modric y Cristiano Ronaldo. A la derecha, el delantero español celebra la conquista y es seguido por su compañero Raúl García, mientras el portero tico empieza a incorporarse.
Al frente estaba nuestro orgullo tico. Su récord de cuatro duelos sin recibir goles en un inicio de temporada, por un lado, lo podría colocar por encima de un histórico ‘merengue’ como Miguel Ángel González (431 minutos en los primeros cinco juegos de la 75-76), pues si lograba que su portería no fuera vulnerada por la delantera bilbaína durante los primeros 72 minutos del partido superaría al cancerbero español. Por otra parte, su gran inicio de campaña era el mensaje de “¡aquí estoy yo!” que el pezeteño le enviaba a Florentino Pérez, jerarca madridista que tan solo 23 días antes había intentado canjearlo por David de Gea del Manchester United. El tardío fax que terminó impidiendo el trueque de arqueros permitiría la permanencia de Keylor, quien justamente al final de aquella temporada iniciaría su colección de tres orejonas.
Así las cosas, ese Athletic-Madrid representaba una bonita oportunidad para que tanto Merino como Navas protagonizaran un interesante duelo futbolístico en el que cualquiera de los dos jugadores podía meterse en la historia… Y el punto culminante sobrevino al minuto 67. Con el marcador 1-0 a favor del cuadro visitante (gol de Karim Benzema), Markel Susaeta corrió por la banda derecha y envió un centro que el hoy delantero morado conectó de testarazo, el balón se fue muy bien colocado cerca del poste izquierdo de Keylor, y cayó el gol que gritaron Sabin, sus compañeros de club, así como los 43.387 seguidores ‘leones’ en las gradas.
Los ticos que vimos aquella fatídica anotación nos lamentamos por la acción del que para nuestros intereses era un ilustre desconocido… quien, sin embargo, logró un hito con el que sueñan muchos futbolistas alrededor del mundo; había marcado su primera anotación en la máxima división, lo había conseguido contra el Real Madrid, y al mismo tiempo había roto un récord que estuvo a cinco minutos de superar un registro que para ese entonces tenía 40 años de vigencia.
El diario bilbaíno ‘El Correo’ tuvo palabras de apoyo para el nacional: “A Keylor Navas se le escurrió la eternidad por sólo cuatro minutos [...] A Navas, que se ha mantenido discreto y sumiso cuando le utilizaron como moneda de cambio para cerrar el traspaso de De Gea, le atraía este récord de manera especial. No por su carácter individualista, en absoluto, sino por reivindicarse y rebelarse ante lo que consideraba una injusticia. El costarricense se ha ganado el cariño de la afición con su discreción, y haberse quedado a cuatro minutos de firmar una auténtica gesta no le arrebatará ese logro”.
Sabin y Keylor en titular de diario bilbaíno. La edición digital del diario ‘El Correo’ del 23 de setiembre de 2015 dio cuenta del gol que Sabin Merino le anotó a Keylor Navas en el Athletic 1-2 Real Madrid en San Mamés. El tanto dejó al costarricense a cuatro minutos de igualar la marca de imbatibilidad de Miguel Ángel González.
Sabin Merino contabilizaría seis tantos en la liga española; el último de ellos también se lo anotaría a Keylor Navas, en partido escenificado en el Santiago Bernabéu en octubre de 2016 (nueva victoria madridista 2-1). Dicen que todo delantero recuerda muy bien su primer gol, así como el último; en el caso del español, siempre recordará a Navas, pues en ambos eventos logró vencerlo. Hoy, por cosas del destino, le correspondió anotar su primer gol en la liga tica, nada menos que en el Estadio Ricardo Saprissa Aymá, el escenario en el que empezó a labrarse su nombre el guardameta costarricense que siempre recordará… ¡Pura vida!
* El autor Esteban Guevara es historiador de fútbol costarricense y responsable de la página de Facebook Gol de Camerino; pronto estará publicando el libro Nuestros primeros legionarios. Futbolistas ticos en el mundo 1875-1990.
** La cita textual es tomada del diario ‘El Correo’ de Bilbao (23.9.2015).