Cuatro ticos presentes en la final de Guatemala
En los últimos tiempos en el futbol chapín se ha convertido una costumbre que jugadores del exterior obtengan la nacionalidad guatemalteca previo a incorporarse a algún club. Actualmente Costa Rica es el país que más futbolistas aporta en la primera división de ese país, no obstante la cifra se empezará a reducir a partir de la temporada 2019-2020.
Y es que ahora la Federación de Futbol de Guatemala regulará las contrataciones de futbolistas naturalizados y los clubes ya no tendrán vía libre para hacerlo.
Con la regla que hay actualmente los equipos de Guatemala pueden contratar cuatro extranjeros y la cantidad que quieran de futbolistas naturalizados.
En la presente temporada de Guatemala, que ya está entrando en su recta final, los ticos que participaron fueron: Michael Umaña (Comunicaciones), Adrián De Lemos, José Mena, Anllel Porras y Andrés Lezcano (Antigua), Jorge Gatgens, José Sánchez y Aaron Navarro (Guastatoya), Jean Scott, Diego Sánchez, Verny Scott (Siquinalá), Víctor Bolívar, Kenny Cunningham, Gabriel Leiva (Malacateco), Álvaro Aguilar (Xelajú). También estaban en el Municipal Irving Calderón y Andrey Francis, quienes quedaron fuera del club.
Lo que se busca con esta nueva medidas es darle mayor participación a los futbolistas guatemaltecos.
El diario La Prensa Libre de Guatemala detalló la información en la siguiente nota
La Federación Nacional de Futbol (Fedefut) reguló este miércoles las contrataciones de futbolistas naturalizados para el máximo circuito futbolístico del país. Ahora los representativos solo podrán inscribir cuatro futbolistas no elegibles para la Selección.
Lejos de desaparecer, el patrón de naturalizar futbolistas centroamericanos se ha convertido en una de las prácticas de las de las que abusan ciertos clubes de la, principalmente los llamados grandes, Municipal —cinco— y Comunicaciones —dos—, y los últimos monarcas, Antigua —cuatro— y Guastatoya —cuatro—; así como Siquinalá —cinco—.
Xelajú MC, Sanarate, Petapa —que recién se activó— y los ascendidos, Iztapa y Chiantla son los representativos que no han seguido ese modelo.
Mientras los conjuntos futbolísticos tuvieron vía libre para inscribir a los naturalizados que quisieron, más cuatro extranjeros por reglamento, el fenómeno no se detuvo, pese a que es obvio que se le quitan espacios al futbolista guatemalteco.
Para el Apertura 2018 participarán 38 foráneos y 23 naturalizados.
Con el acuerdo emitido ayer por la Fedefut, el abuso de los equipos recibe un freno, solo que será a partir de la temporada 2019-2020.
“Los nacionalizados le quitan oportunidades a los jugadores nacionales. Es la verdad. Si bien cualquier centroamericano tiene el derecho de hacerlo, en la elegibilidad para la Selección Nacional está el problema”, aseguró el seleccionador Wálter Claverí.
“No es un problema de fondo, como la formación de jugadores, pero hay que hacer cosas para que Guatemala logre ir al Mundial y no para que se retroceda. La Fedefut es la única que puede controlar la situación”, agregó.
Según el reglamento de competencia de la Liga, en su artículo 8, “los clubes tendrán derecho a mantener inscritos en su nómina hasta cuatro jugadores extranjeros no elegibles para Selección Nacional, pudiendo participar simultáneamente”. Sin embargo, en tal ordenamiento legal, no aparece normado lo referente a naturalizados, por lo que la Fedefut tuvo que actuar para frenar el abuso desmedido de los equipos.
“Sabemos que hay que regularizar esa situación porque el dinero que están invirtiendo los equipos en nacionalizar jugadores lo podrían utilizar para sus fuerzas básicas”, aseguró Alfonso Cruz, presidente de la Liga.
La última cúpula federativa en haber frenado el abuso de la inscripción de naturalizados fue la que lideró Óscar Arroyo. Sucedió en la temporada 2006-2007, hace 11 años, cuando estableció que solo era permitido el uso de tres jugadores no elegibles para la Selección Nacional.
Esa medida se mantuvo por los siguientes cuatro años. Sin embargo, todo se derrumbó cuando Brayan Jiménez Hernández —procesado judicialmente en EE. UU.— volvió a alterar el reglamento y avaló la norma vigente.
Atropello
Para el Apertura 2018, los escarlatas utilizarán, además de sus cuatro extranjeros —tres argentinos y un uruguayo— a cinco nacionalizados —dos costarricenses, dos hondureños y un salvadoreño—.
Antigua GFC, que desde que le compró la ficha a Heredia adoptó el modelo de la naturalización, tendrá a sus cuatro foráneos más otros cuatro jugadores procedentes de Costa Rica, que con 18 elementos domina el mercado local.
El último campeón, Guastatoya, también usó la misma fórmula: cuatro nacionalizados —tres costarricenses y un hondureño— y cuatro extranjeros —un colombiano, un panameño y dos mexicanos—.
“Nuestro propio futbol está fogueando a los costarricenses. Seguimos haciendo las cosas al revés. Hay que darle oportunidad al nacional y no quitarsela”, comentó la leyenda roja, Alberto López Oliva.