Tras un Mundial Brasil 2014 para el olvido el portero español, Iker Casillas, tenía una buena prueba ante el Sevilla en el comienzo de una temporada muy intensa con el Real Madrid y el guardameta cumplió.
Si bien es cierto el Sevilla ofreció poco, Casillas respondió cuando fue exigido el martes en Cardiff.
La más clara para el Sevilla fue luego del primer gol de Cristiano Ronaldo. El capitán madridista salvó un mano a mano a Carriço, que se quedó delante de él después de un error defensivo de Coentrao.
"Después de una final de Liga de Campeones, un Mundial y una pretemporada desacertadas, el guardameta mostoleño hizo en la Supercopa lo que ha hecho en la mayor parte de su carrera: aparecer cuando su equipo le necesitaba", destacó la prensa española.
En los minutos finales del partido Sevilla encimó con todo pero no pudo vencer a un seguro Casillas. El tico Keylor Navas, quien la semana pasada firmó un contrato con los merengues por seis años, estuvo en el banquillo de los suplentes.
Es probable que Navas debute el sábado en un amistoso que el Madrid tendrá ante la Fiorentina.