La invasión de Rusia a Ucrania, ordenada esta semana por el presidente Vladimir Putin, va dejando efectos colaterales en el fútbol.
Primero, el cambio de sede de la final de la Champions League de San Petersburgo a París, y ahora la posible venta del Chelsea por parte de Roman Abramovich, el millonario dueño del equipo inglés que no tendría más opciones que traspasar el club si recibe sanciones del Gobierno británico por sus estrechas relaciones con el Kremlin.
Según el diario inglés Daily Mail, inversionistas privados se encuentran siguiendo muy de cerca la situación del Chelsea. Si Abramovich es sancionado, el vigente campeón de la Champions League, valorizado en más de 1.5 billones de euros, podría entrar en el mercado tarde o temprano. Pretendientes es lo que sobran.
De hecho, según la citada fuente, el Chelsea recibió este mes una oferta de compra. Sin embargo, el magnate Abramovich, sin imaginar en el lío que iba a estar involucrado por su cercanía con Putin, declinó el ofrecimiento.
MÁS INFORMACIÓN
- Christian Eriksen volvió a jugar un partido oficial 259 días después de sufrir paro cardíaco
- José Rodolfo Alfaro habla sobre su paso por Saprissa y su principal desafío: volver a primera división
- El ruso Roman Abramovich, dueño del Chelsea, tiene prohibido vivir en Reino Unido por ser un "facilitador clave" del régimen de Putin
Prohibido el ingreso
De acuerdo a información del diario The Sun, los funcionarios de inmigración tendrían instrucciones claras de no dejar pasar al máximo mandatario del Chelsea a tierras inglesas, una acción que ya se habría producido con anterioridad.
El diario, que cita fuentes seguridad de alto nivel, asegura que “es poco probable que se le permita volver a establecerse en Gran Bretaña”. Ya en 2018 retiró su solicitud de un visado de inversor después de que un ex espía ruso y su hija fueran envenenados en la ciudad de Salisbury, generando una tensión que sigue viva entre el Reino Unido y Rusia.
Entonces, Abramovich pidió la ciudadanía israelí, pasaporte que ha utilizado para visitar el país. Así las cosas, su supuesta relación con Vladimir Putin, unido al conflicto armado entre Ucrania y Rusia, le impedirían vivir en el Reino Unido o solicitar la ciudadanía británica.
Fuente: Daily Mail - depor.com