Es el Mundial de Messi. En su quinta y última aventura en el torneo, como el jugador más definitivo, como el motor del reencuentro de Argentina con la cima del mundo, 36 años después del triunfo en México 1986 con Diego Armando Maradona.
Messi recogió emocionado el trofeo como mejor futbolista de Catar 2022, en el que relevó a Luka Modric, el ganador en Rusia 2018, en su despedida de los Mundiales, de los que se va también como el jugador con más partidos de la historia, con 26.
Argentina obtuvo otras dos menciones individuales: para Enzo Fernández, clave en el esquema de Lionel Scaloni en las eliminatorias, fue el de mejor joven; para Emiliano 'Dibu' Martínez, para penaltis en cuartos y en la final, el del mejor portero.
La Bota de Oro al mejor goleador fue para Mbappé, entre el desconsuelo de la derrota. Desde 2002, con Ronaldo Nazário con Brasil, nadie alcanzaba ocho goles en la fase final de la competición.