Cuando acabó el partido ante Herediano por la Final de la Segunda Fase, Figueroa debía presentarse al control, sin embargo en ese momento recibió una llamada donde le informaban sobre la supuesta muerte de un familiar. Eso hizo que no se le realizara la prueba. Sin embargo, días después se mencionó en la prensa hondureña que ningún familiar del futbolista había fallecido.
Las informaciones desde Honduras han levantado sospecha en la Comisión de la FEDEFÚTBOL, que no dejará el tema ahí y ya le solicitó un acta de defunción.
“El caso de Figueroa nunca se archivó. Desde el día que estuvimos en el recinto del doping se le dijo a Alajuelense y al jugador en repetidas ocasiones, que debía presentar la prueba de que efectivamente se había muerto el familiar que decía… Hay que ver qué responde el jugador. Se le hizo una solicitud a Alajuelense para que el futbolista presentara una acta de defunción, pero en el club nos indicaron que ya se desligó”, explicó Eduardo Alfaro, el presidente de dicha comisión, en una entrevista con La Nación.
De no presentar tal acta, la Comisión Antidopaje tomará otras acciones para llegar a la razón del por cual eludió los controles que han realizado.