El nuevo inquilino de la Primera División deberá lidiar con un gran problema de entrada: su sede.
El equipo de Jicaral Sercoba, que tiene el Estadio de la Asociación Cívica Jicaraleña como su reducto oficial, no podrá usar en la máxima categoría, pues no cuenta con las condiciones mínimas exigidas por la UNAFUT.
Su sede, al menos en el primer semestre en Primera División, será el Estadio Edgardo Baldono Briceño de Liberia, ubicado a unos 130 kilómetros de distancia de Jicaral.
Para el traslado por tierra, el equipo deberá invertir como mínimo cuatro horas (dos de ida y dos de vuelta) para sus partidos como local.
El presidente y dueño del equipo, Roy Barrantes, tiene en mente la construcción de un nuevo estadio, que estará ubicado en en Barrio El Mango, sin embargo, las obras aún no dan inicio.
Se espera que el nuevo escenario cuenta con una capacidad de 2.000 espectadores y que cumpla con las exigencias de la UNAFUT y la Federación Costarricense de Fútbol.