Uno de los técnicos más particulares que tuvo Luis Antonio Marín en su carrera como futbolista fue el brasileño Valdeir Badú Vieira, quien llegó a Costa Rica para dirigir a Alajuelense en 1994.
El actual estratega de San Carlos recuerda parte de esos años en donde La Liga marcó una época.
"La química con la afición fue impresionante, el Estadio siempre estaba lleno sin importar el rival..., Badú se ganó a la gente y al pueblo con su forma de ser, él se iba caminando al mercado, por el parque y saludaba a todo el mundo", comentó Marín en una entrevista en Radio Santa Clara.
"Cuando Badú asumió al equipo estábamos en un muy mal momento, ocupábamos como el octavo lugar, él llegó y le dio alegría al grupo, nos liberó, nos quitó la presión, salgan a divertirse nos dijo, trabajó la parte mental y el equipo empezó a jugar bien y empezamos para arriba".
"Fue algo extraño porque realmente no había mucho trabajo táctico, era algo más que todo mental", agregó el ex capitán de la tricolor.
Marín debutó en el futbol de la primera división con Carmelita en 1992. Un año después llegó a Alajuelense en donde se convirtió en ídolo.
Con la selección mayor de Costa Rica disputó los mundiales de Corea-Japón 2002 y Alemania 2006.
Como técnico Luis vive en San Carlos su primera experiencia. Anteriormente había estado como asistente en Alajuelense y en la Sele.
Colaboración: William Alonso Jiménez