El técnico defendió que en su carrera como futbolista nunca fue expulsado fuera del país, mientras que como entrenador en Costa Rica solo ha vivido hechos aislados.
"Yo jugué un mundial y no me sacaron amarilla, jugué copas América y no me sacaron amarilla, jugué en la MLS y nunca me expulsaron, jugué en Europa y nunca me expulsaron. Acá no les gusta que se les digan las verdades... La prepotencia con que le llegan a los técnicos cuando no están en un equipo grande, es muy fácil echarlos", mencionó.
El ex defensor añadió que a los silbateros también se les debe medir por sus actuaciones.
"A los árbitros también se les debe investigar y tenemos que denunciarlos cuando ellos ponen en sus actas mentiras, como lo que dijo Jeffrey Solís en un informe que yo había empujado al portero Alfonso Quesada. La santa palabra no debe ser la del árbitro", agregó.
Por otra parte, Wright confirmó que Hugo Viegas dejó de ser uno de sus asistentes y se quedó solamente con Robert Arias.