Una vez conquistado de forma inesperada la pasada jornada, el Manchester City empezó a asentar su liderato en la Premier League con un ajustado triunfo ante un Wolverhampton con un planteamiento excesivamente defensivo.
El equipo de Pep Guardiola ganó con polémica, eso sí, pues hizo el único tanto de penalti por una mano que no lo parecía de Moutinho.
Y eso que el City salió con ganas de borrar la agridulce imagen dejada en Alemania en la Champions. Liderado por un estratosférico Cancelo, el equipo celeste metió en su área a los Wolves de salida. El luso estaba en todas partes, tuvo las primeras ocasiones, cortó todo avance de los visitantes, puso centros. Vive un excelente momento de forma y su equipo lo agradeció en el arranque.
Otro que tuvo un comienzo de partido destacado fue Sterling, quien no cesó de buscar el tanto ante un José Sa que estuvo muy acertado para los de Bruno Lage. Ambos fueron las luces de un City sin De Bruyne, Mahrez o Foden, en el que cuajaron un partido gris Grealish, Bernardo Silva o Gabriel Jesus.
A los Wolves les salió el plan a la perfección en el primer tiempo, a pesar de que no inquietaron a Ederson en absolutamente nada. El plan del técnico luso era defender y todo parecía ir sobre ruedas hasta que a Raúl Jiménez se le cruzaron los cables en el largo añadido de primer tiempo. Una patada le costó una rigurosa amarilla al mexicano, quien acto seguido evitó el saque en el centro del campo y vio la segunda amonestación.
El plan defensivo de los visitantes se radicalizó aún más y quedó claro tras el descanso. Siete saques de esquina seguidos y una posesión ¡del 93%! tuvo en el inicio del segundo tiempo un City que no concretaba. Los de Pep Guardiola vivían en área rival, pero no traducían esa presencia en ocasiones claras.
Gabriel Jesus por fin despertó en el segundo tiempo con un par de ocasiones claras y Coady, que hizo un partidazo, evitó en la misma línea que Gündogan hiciera el primero en lo que ya era una avalancha 'citizen'.
Era cuestión de tiempo que el City lograra el triunfo ante diez y contra un equipo sin más intención que defender, pero no que solo llegara un tanto y fuera con tanta polémica. El único gol del partido lo logró el equipo del Etihad después de un centro de Sterling que dio en la axila de Moutinho. Una acción de VAR, parecía, pero el videoarbitraje no corrigió nada y el propio Sterling hizo el 1-0 engañando a José Sa.
De ahí al final -quedaba media hora-, el Manchester City se cansó de fallar ocasiones más o menos claras y terminó firmando un triunfo por la mínima que puso en duda Coady en el añadido, con un cabezazo que obligó a Ederson a desviar a córner en el único tiro a puerta del partido de los visitantes. Con polémica pero un dominio claro, el City empieza a asentarse en la cima en busca de otro título para Pep en Inglaterra.
Líder
El Manchester City está en lo más alto de la tabla con 38 puntos. Liverpool es segundo con 37 y en el tercer lugar se encuentra el Chelsea con 36.
