La etapa del delantero belga, Eden Hazard, en el Real Madrid no ha sido la esperada tanto para el jugador, el entrenador francés, Zinedine Zidane, como para los aficionados que se ilusionaron al ver que uno de sus deseos se cumplía cuando los blancos anunciaron el fichaje del belga proveniente del Chelsea, sin embargo, para el presidente del club, Florentino Pérez y el director general, José Ángel Sánchez, el fichaje de Hazard no era del todo convincente.
Y es que los primeros informes que llegaron a los despachos del Real Madrid provenientes del Chelsea y la selección belga sobre el delantero hablaban de un jugador con ética cuestionable a pesar de ser muy talentoso. Informes que eran similares a lo que los jugadores del equipo ya conocían al preguntarle a compatriotas que llegaron a coincidir con Eden en el fútbol inglés.
En el vestuario de la selección española los jugadores merengue llegaron a preguntarle a sus compañeros que juegan en la Premier League sobre el belga, la respuesta fue muy contundente, es un jugador diferente, pero que no le gusta trabajar en los entrenamientos y tiene tendencia al sobrepeso en los primeros meses de temporada.
Lo conocido por los madridistas se cumplió cuando Hazard llegó a los primeros entrenamientos pasado de peso y sin muchas ganas de ponerse a trabajar, de hecho, el jugador duro cuatro meses en ponerse en forma y cuando empezaba a tomar ritmo llegaron las lesiones, además uno de los pesos pesados del vestuario blanco llegó a exclamar "hemos fichado un freestyler".
Además, las referencias obtenidas por el conjunto merengue advertían que Hazard alcanza su nivel máximo en el tramo decisivo de la temporada, "especialmente si en el calendario hay grandes torneos, como el Mundial o la Eurocopa". Sin embargo, el belga no fue capaz de justificar los 100 millones de euros que pagó el club madrileño, ante el Manchester City jugó como titular y se esperaba que lograra marcar la diferencia, pero estuvo completamente desaparecido.
Para la precente temporada la expectativa estaba al máximo, el presidente del club, el vestuario y una parte de la afición no le tienen fe a uno de los fichajes más caros de la historia del Real Madrid. La presente campaña no la inicia al mismo ritmo que sus compañeros por lesión, poco tiempo después de su regreso a los terrenos de juego contrajo Covid y una vez más dos partidos después de reaparecer volvió a caer lesionado en esta ocasión con problemas musculares en el recto anterior del muslo derecho.
En rueda de prensa Zidane lo protegió y declaró que el belga no sufrió "una lesión muscular, sino un golpe", sin embargo las pruebas realizadas al futbolista confirmaron la lesión muscular.
El belga se esta convirtiendo en un problema para Zidane y Florentino Pérez que no lo quiso desde el primer momento ha tenido roces con el francés cuando toca hablar de fichajes, el técnico tiene una idea y la presidencia y dirección general otro plan, además de la poca fe de gran parte del vestuario que ven en Eden la misma falta de compromiso que Bale.
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