El Merengue derrotó 1-4 al Al Ahly de Egipto con goles de Vinicius, Federico Valverde, Rodrygo y Sergio Arribas para meterse en la final del Mundial de Clubes donde se enfrentará el sábado a Al-Hilal.
Real Madrid necesitaba una victoria frente a un rival egipcio para dejar atrás un presente con más dudas que certezas en cuanto a su potencial. Lo consiguió aunque Al Ahly también le hizo las cosas bravas en la noche de Marruecos.
Durante el cuarto de hora inicial el conjunto de Carlo Ancelotti controló la pelota pero no lastimó a Mohamed El-Shenawy. De hecho, las primeras ocasiones de peligro las gestó la escuadra africana con un tiro alto de Mohamed Sherif que agarró a la defensa española a contrapierna y un cabezazo de Hussein El Shahat que se fue besando el travesaño.
Cuando peor la pasaba, Real Madrid reaccionó y en cuestión de segundos le mostró al Al Ahly lo que era capaz de ahcer. Aurelien Tchouameni fusiló a El-Shenawy que respondió dando rebote. En la jugada siguiente Vinicius tuvo un mano a mano sin ángulo que salió cerca del palo izquierdo. Y, en la otra, Rodrygo le robó la bola a Amr El Soleya, buscó la personal y su chance dio en la cara externa de la red.
Los egipcios no querían quedarse atrás, ya habían saboreados las mieles ofensivas, y exigieron a Andriy Lunin con un zapatazo sin ángulo de Hussein El Shahat que el ucraniano mandó al córner. Sin embargo, cuando todo parecía que iría al descanso igualado en cero, el merengue aprovechó que Mahmoud Metwaly para que Vinicius no dilapide semejante regalo y con una deliciosa definición ponga el 1 a 0.
Todo lo que trabajo Al Ahly en el entretiempo se desvaneció porque Real Madrid estiró la ventaja a los 57 segundos de la complementaria. Luka Modric le dio un pase preciso a Rodrygo que probó suerte en el cara a cara, Mohamed El-Shenawy dio rebote, y allí apareció el uruguayo Valverde para colocar las cosas 2 a 0 en Marruecos.
El asunto parecía totalmente liquidado pero las cosas se complicaron para los de Ancelotti. Los dirigidos por Marcel Koller descontaron después de un penal que Eduardo Camavinga le cometió a Hussein El Shahat y que, finalmente, convirtió Ali Maâloul a 25 para el final.
El conjunto egipcio sabía que no podía aflojar y arrinconó con sus armas al Merengue. Afsha recibió sin marcas un centro desde la derecha pero lo mandó por arriba del travesaño. Más tarde, Amr El Soleya de cabeza exigió a Lunin que la mandó justo al córner. Y cuando la Casa Blanca tuvo la oportunidad de estirar la brecha, Luka Modric desperdició un penal que atajó Mohamed El-Shenawy.
Lo que intentaron los africanos, de todos modos, lo definieron los españoles en una maravillosa definición que bajó por completo la cortina en suelo marroquí. Una doble pared de Dani Ceballos con Rodrygo dejó al brasilero mano a mano con el arquero para definir con una hermosura. No obstante hubo tiempo para más y el ingresado Sergio Arribas también se anotó en el marcador para decorar la goleada.
El próximo sábado el Real Madrid se medirá al Al-Hilal de Arabia Saudita en la final del Mundial de Clubes.
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