El Real Madrid debió acudir a su épicas remontadas para lograr derrotar 2-3 al Villarreal en los octavos de final de la Copa del Rey.
Los dirigidos por Carlo Ancelotti no están pasando por un buen momento futbolístico y así se reflejó a lo largo de los primeros 45 minutos, en donde el conjunto Castellón aprovechó para ponerse por delante en el marcador por ventaja de 2-0.
Para el submarino amarillo el encuentro arrancó de la mejor forma posible. Y es que la primera anotación llegó al minuto 3 gracias a un saque de banda lanzado al área merengue, Gerard Moreno aguantó de espalda para habilitar al francés Étienne Capoue que sacó un potente remate al palo largo del belga Thibaut Courtois.
El Real Madrid le costó reaccionar, pero tuvo el empate en una jugada prácticamente que de inmediato con el uruguayo Fede Valverde, pero su disparo se fue por encima del arco.
El Villarreal aprovechada los estragos que hacia el conjunto merengue en el mediocampo y a las espaldas de Antonio Rudiger y Eder Militao, al realizar combinaciones rápidas y mucha movilidad pero por una u otra razón no lograba concretar ante el arco de Courtois.
Finalmente el 2-0 para los locales llegaría a pocos minutos del descanso tras una gran acción colectiva. Un balón largo le quedó al nigeriano Samuel Chukwueze que aceleró y en las inmediaciones del área descargo para el joven español Yeremy Pino, que no logró encontrar un espacio por lo que prefirió combinar con Moreno, quien vio el hueco en la defensa blanca para habilitar a Chukwueze que no se puso nervioso ante la salida de Courtois.
Tras el paso por los vestuarios el Madrid salió con la intención de cambiar la historia del compromiso e incluso entrar al campo los españoles Dani Ceballos y Marco Asensio por el alemán Toni Kroos y el brasileño Rodrygo.
Los cambios realizados por Ancelotti surtieron efecto en el minuto 57, cuando los blancos armaron una buena jugada por la derecha y que terminó con un centro de Ceballos para que Vinicius con todo el arco a favor pusiera el 2-1.
La anotación del Real Madrid provocó que en el miedo se apoderara del Villarreal y no lograran mostrarse con confianza como en la primera mitad del partido. Los blancos olieron sangre y fueron por la presa. Al 69', Ceballos puso un centro pedido para que Karim Benzema cabeceara picado, pero el portero sueco Filip Jorgensen sacó la mano para evitar el tanto, sin embargo el rebote le quedó a Éder Militao que solo tuvo que empujar el balón al fondo de las redes para el 2-2.
Con la confianza a tope, el Madrid cerrado con todas sus fuerzas para evitar los tiempos extras y sufrir de un mayor desgaste. La recompensa llegó al 86, cuando Marco Asensio no dio por perdido un balón en el área del Villarreal, observó la llegada desde segunda línea de Dani Ceballos cedió y el volante con un remate raso puso el definitivo 2-3.
El Real Madrid conocerá este viernes a su rival en los cuartos de final de la Copa del Rey.
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