Southampton le ganó 1-0 a Liverpool en el cierre de la fecha 17 de la Premier League inglesa y dejo la parte alta de la tabla muy reñida. Hay siete equipos separados por solo cuatro puntos.
Fue una actuación táctica brillante por parte de los de Ralph Hasenhüttl, quien se emocionó hasta las lágrimas al sonar el pitazo final, en el St. Mary's Stadium. No solo a la defensiva, sino a la ofensiva también.
James Ward-Prowse sorprendió a todos con una ejecución de tiro libre frente al área y Danny Ings, el goleador de los Santos, anotó el gol con una especie de media chilena que dejó sin oportunidad al guardamete brasileño Alisson.
Cabe destacar que por las lesiones de sus defensores, Klopp se vio obligado a poner a Henderson y Fabinho como la pareja de centrales.
La ventaja le permitió al Southampton defender bien. Con una defensa sincronizada y un Ward-Prowse en muy buena forma, pudieron detener los sucesivos intentos de Liverpool, comandado por sus laureados atacantes: Salah, Mané y Firmino.
Klopp insistió con jugadores de ataque en la segunda mitad como el suizo Shaqiri, pero esta vez se quedó sin otras variantes. Diogo Jota, el gran fichaje del último mercado de los Reds, sigue fuera por una lesión de rodilla.
Así las cosas, Liverpool sufrió su segunda derrota en la Premier y ahora acumula tres juegos sin ganar, tras los empates ante West Brom y Newcastle. Esa pequeña mala racha ha dejado la parte alta de la tabla al rojo vivo.
Por ahora, Liverpool es puntero con 33 unidades, aunque Manchester United tiene la misma cantidad con un juego menos. Leicester los sigue de cerca con 32 unidades, mientras que después están al acecho Tottenham, Manchester City, el propio Southampton y Everton, todos con 29.
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