El equipo del Chelsea sumó su tercera victoria consecutiva en Premier League y derrotó, con remontada incluida, al Burnley (1-4).
La entrada al campo de Raheem Sterling resultó crucial de cara a los intereses de los 'blues'.
Fue la tercera victoria del equipo del técnico Mauricio Pochettino, entre la Premier, con dos, y la Copa de la Liga, con una; la reacción que necesitaba el conjunto londinense, lastrado hasta entonces por un improductivo inicio en el campeonato inglés, con apenas un triunfo en las primeras seis citas. Hasta su reencuentro.
Sin gol desde el 25 de agosto, hubo más acciones este sábado de Sterling, aunque no tan decisivas como las tres que lo propusieron indiscutiblemente como figura del encuentro. Siempre activo, casi siempre desbordante, atrevido y vertical para encarar a la defensa del Burnley, goleador además en el 1-3, en él se apoyó el Chelsea para sobreponerse al enésimo contratiempo del curso, a una desventaja en el marcador que no esperaba.
El primer tiro del Chelsea también fue de Sterling, justo en la jugada anterior al 1-0 del Burnley, que descubrió de nuevo las debilidades del conjunto 'blue', superado al contragolpe, a destiempo en todo el transcurso de la conducción de Lyle Foster, del pase a Wilson Odobert y de la finalización del interesante extremo, que superó el aspecto contemplativo de Cucurella, titular en el lateral derecho, con un disparo certero. Minuto 15.
Lo sostuvo hasta el tramo final de la primera parte, hasta la primera acción decisiva de Sterling, por la banda izquierda. Su centro al área fue gol por el desafortunado despeje de Al Dakhil para el 1-1 del Chelsea, aliviado con el empate, pero, sobre todo, con el partido de Sterling. Una garantía para que el triunfo, como se demostró ya en el segundo tiempo.
En tres minutos, el extremo desbordó de nuevo por el flanco izquierdo, hasta que fue derribado por Vitinho, cuya entrada imprudente, desproporcionada, desencadenó en el penalti que transformó Cole Palmer. Minuto 50. Después, Robert Sánchez voló a otro intento de Odobert. Luego, Sterling lo resolvió ya todo, con el 1-3 con la izquierda.
El 1-4 fue de Nico Jackson, en el 75, con una buena maniobra dentro del área, tras un pase de Cole Palmer. La jugada la había iniciado también Sterling, el triunfador del 1-4 al Burnley que pone al Chelsea aún a nueve puntos del liderato de la Premier, que serán diez si el Manchester City vence este domingo al Arsenal. Su oponente continúa en descenso.
