El AC Milan se convirtió en el nuevo líder de la Serie A tras ganar por la mínima al Genoa (0-1). Pulisic anotó el tanto del triunfo de los 'rossoneri' en el 87', pero la cosa se complicó muy seriamente en el 98' con la expulsión de Maignan.
El guardameta salió de su posición para cortar el avance de Ekuban y le pegó un rodillazo en el rostro, lo que llevó al árbitro a enseñarle la roja directa. Al haber hecho Pioli los 5 cambios, un jugador de campo tuvo que ponerse bajo los palos y el elegido fue Giroud.
El partido se dirigía inevitablemente al empate cuando todo dio un vuelco. En el 87', Pulisic, con una media vuelta, se hizo hueco para superar al cancerbero y encarriló lo que parecía una victoria segura.
Giroud sustituyó al guardameta cuando quedaban varios minutos para terminar la contienda. En el lanzamiento de falta del Genoa, la pelota impactó en la barrera y fue directa a la cruceta. El delantero tocó el palo en señal de agradecimiento.
Poco después, el propio Giroud se atrevió a salir de puños y lo hizo sin mirar ni siquiera. Finalmente, el '9', que lucía la camiseta de Maignan, se hizo con el cuero y se tiró al suelo. Ya en la última acción del partido, Olivier volvió a atapar otro balón y sus compañeros, tras escuchar el pitido final, le rodearon y lo celebraron con él.
El final fue de auténtica locura porque el portero del Genoa Josep Martínez, que ya vio una amarilla en el 86', fue amonestado de nuevo por un plantillazo en el 103' en el área 'rossonera'. El español subió a rematar en un saque de esquina y dejó con 10 a su equipo. Leali, el guardameta suplente, entró por De Winter, jugador de campo.
Milan quedó con 21 puntos en lo más alto de la tabla. Inter, que igualó de local 2-2 contra Bolonia, suma 19 unidades en el segundo lugar. La Juventus viene tercero con 17.
