Las competiciones internacionales han llegado a sus instancias finales, y la segunda división inglesa no es la excepción.
Coventry y Luton Town se enfrentaran muy pronto en Wembley, para definir al próximo inquilino de la Premier League, y mientras que uno de estos equipos cuenta con un estadio de primer nivel, el otro tendrá mucho trabajo para disputar sus partidos de local la próxima campaña.
Hablamos del Luton Town, club que lleva jugando en Kenilworth Road, un pequeño estadio con capacidad para diez mil personas, desde 1905. Pese a su peculiar aspecto el estadio sigue albergando todos los encuentros del club cada campaña, sin embargo las particularidades abundan en el recinto ubicado en Bury Park.
La entrada a Oak Stand
Al acceder a Oak Stand, la entrada principal de estadio del Luton, no nos vamos a encontrar con un complejo de lujo lleno de guardias de seguridad, sino más bien con las casas aledañas de quienes viven en Bury Park, una a cada lado del estadio. Por si fuera poco al entrar al recinto nos encontraremos con los patios traseros de las casas que rodean Kenilworth Road, para posteriormente subir una pequeña escalera que lleva a la gradería del estadio.
Ya al ingresar al estadio las cosas tienden a complicarse. Sillas sin acolchar, poco espacio entre cada fila de asientos, y vigas que dificultan la visibilidad del encuentro son algunos de los obstáculos que los hinchas tienen que afrontar si quieren ver un partido de su amado club, sin embargo los locales la pasan mucho mejor que los visitantes.
Una bienvenida cordial
Un dato muy curioso de Kenilworth Road es que parece estar diseñado para que los aficionados visitantes la pasen lo peor posible, pues por más increíble que parezca no hay asientos en la zona de visitantes, además de esto las condiciones y construcción de la gradería hacen imposible disfrutar el partido si se es de otro club.
Un futuro incierto
De momento el club deberá invertir diez millones de euros en remodelaciones si quiere que Kenilworth Road albergue encuentros de Premier League, sin embargo los planes para un nuevo estadio ya han comenzado, y el histórico recinto deberá someterse a diversos cambios estructurales si quiere seguir en pie.