Casillas decidió colgar los guantes tras un año marcado por su problema de salud que presentó en medio de un entrenamiento con el Porto el pasado 1 de mayo de 2019.
El guardameta que paso por todas las categorías menores del Real Madrid desde que tenía 9 años y que consiguió cinco Ligas, tres Champions League, tres Mundiales de Clubes, dos Copas del Rey, cuatro Supercopas de España y dos Supercopas de Europa en 725 partidos en las 16 temporadas que defendió el marco de su segunda casa. Además, formó parte y líder a la mejor generación de futbolistas españoles consiguiendo dos Eurocopas 2008 y 2012 y el Mundial de Sudáfrica 2010, su última aventuraste en Portugal con el FC Porto durante los últimos 5 años y consiguió una Liga y una Supercopa.
"Lo importante es el camino que recorres y la gente que te acompaña, no el destino al que te lleva, porque eso con trabajo y esfuerzo, llega solo y creo que puedo decir, sin dudar, que ha sido el camino y el destino soñado. Gracias", escribió el ahora ex portero en sus redes sociales junto a una carta en la que anuncia su retiro.
Con base al esfuerzo y el éxito que tuvo, Iker Casillas se convirtió en un referente del futbol mundial y el mejor portero de la historia del fútbol español.
"Hoy es uno de los días más importantes y, a la vez difíciles, de mi vida deportiva: ha llegado el momento de decir adiós", inicia Casillas una carta que publicó firmada y con los escudos de Real Madrid, selección española y Oporto.
SU ÉPOCA CONFLICTIVA CON MOURINHO EN BUSCA DE LA PAZ DEL FÚTBOL ESPAÑOL
En la época de Jose Mourinho como entrenador del Real Madrid se vivieron los clásicos con más odio que rivalidad de la historia. Iker Casillas tuvo sus problemas con el técnico portugués al querer calmar las aguas entre madridistas y culés.
Todo comenzó en el 2011-2012, el Madrid y Barcelona se median a inicios de temporada por la Supercopa de España era el partido de vuelta en el Camp Nou (3-2, 2-2 en la ida). Los blancos perdieron el primer titulo de la temporada y comenzó la guerra entre ambos equipos.
En los últimos minutos se dio un intento de bronca en el medio campo, cerca de los banquillos, algunos jugadores se acercaron para separar a los implicados y ambos banquillos brincaron para poner paz, sin embargo el portugués no tenía alguna intención alguno, puesto que le metió un dedo en el ojo a Tito Vilanova, en aquel entonces asistente de Pep Guardiola.
En noviembre de 2018 en una entrevista a beIn Iker Casillas le confesó a Jorge Valdano que, "Aquello fue una locura. Parecía que estuviéramos en medio de una guerra entre Cataluña y España. Comenzó a salir ese madridista que a mí nunca me gustó. Yo soy madridista. Quiero que gane siempre el Real Madrid. Pero no quería llegar a esos extremos (clásicos desde el 2010-2013)".
Para Andrés Iniesta aquellas partidos con Mourinho al mando del conjunto merengue no existía la rivalidad, sino el odio.
Tras aquel acto bochornoso el capitán del Real Madrid y de la selección española por aquellos tiempos, se puso a reflexionar y decidió realizar dos llamadas, la primera a Xavi Hernández, segundo capitán del Barcelona, una llamada que no sobre paso los cinco minutos, pero con tiempo suficiente para reprocharse e intercambiar uno que otro insulto. La segundo fue con Carles Puyol el capitán culé, con el que también tuvo sus intercambios y finalmente terminaron acordando mediar por mantener la paz en los partidos restantes entre ambos clubes.
"La situación no era normal. Era ya lamentable. Se nos había ido de las manos", admitió en 2014 Casillas a Inañi Gabilondo en Canal Plus.
"Pero yo no pedí perdón a Xavi. Para nada. Por mucho que hubiera quien quisiera vender que el capitán del Real Madrid se había bajado los pantalones. Llamé para decirle que esto nos iba a pasar factura", mantuvo Iker Casillas.
Aunque diversos medios de comunicación afirmaban que Mourinho se molesto por las llamadas el meta confeso que su entrenador nunca le dijo nada sobre las llamadas, pero sí hay mucha gente que le manifestó el malestar del portugués.
Sin embargo, la temporada 2011-2012 el meta jugó todos los partidos en la que el club marco el récord de puntos en Liga al cosechar 100, y en la que fue eliminado por el Barcelona en cuarto de final de la Copa del Rey, y por el Bayern en las semifinales de Champions League en panales..
Para la temporada siguiente, un 22 de diciembre de 2012, Casillas fue suplente en la derrota del Real Madrid contra el Málaga (3-2) con el canterano y con apenas partidos jugados en primera división Antonio Adán como titular. SU suplencia se dio por decisión técnica, pero era claro que la confianza entre ambas partes se había resquebrajado.
El 23 de enero, en un partido de Copas del Rey ante el Valencia en Mestalla, Álvaro Arbeloa propinó una patada fortuita a Casillas que le provoco una fractura en su mano izquierda. El parte médico confirmó la baja por dos meses del guardameta.
Días después, la periodista y pareja del guardameta, Sara Carbonero, afirmó en un intervención para el programa de Televisa 'La Jugada', que había división en el vestuario del Real Madrid en torno a la figura de su entrenador. Tras aquella información el meta no volvió a jugar en la temporada, y recibió insultos de parte de la afición.
Además en ruedas de prensa se discutía el desempeño de Casillas en los entrenamientos e incluso la competencia por el puesto titular con Diego López llegó a lo extremo.
El tiempo paso e Iker Casillas reflexiono sobre aquellos problemas con su ex entrenador, pero no se arrepiente de la posición que tomo en torno a lo sucedido. "Era injusto. Absurdo. Quizá yo tendría que haber contestado a Mourinho. Pero opté por el bien del club y el silencia".
Por su parte, Mourinho le ve de otro modo y en una entrevista para el diario Record en 2018 declaró, "Casillas se enfrentó a mí y de un modo que se le da mejor que a nadie: escondido".
Durante cuatro años el portero vio como parte de la afición lo convirtió en el villano de la historia, hasta el momento en el decidió cambiar de aires.