En Guatemala la expectativa es total con miras a la final de vuelta de la Copa Centroamericana de la Concacaf 2025 entre Xelajú y Alajuelense.
Tan es así que el presidente de Guatemala, Bernardo Arévalo, se convirtió inesperadamente en protagonista al enviar un mensaje directo al plantel chapín.
El gesto ocurrió durante La Ronda, la conferencia semanal del Ejecutivo, cuando la secretaria de Comunicación Social, Karina García Ruano, enlazó en vivo con el mandatario, quien realizaba una gira de trabajo en San Pedro Sacatepéquez, San Marcos.
Allí, Arévalo no dudó en sumarse al ambiente futbolero que domina a su país: "Bueno, Chivos... ahora es cuando. ¡Vamos por todo!", expresó con una sonrisa. Sus palabras rápidamente se viralizaron y llegaron al campamento quetzalteco, donde el ánimo está a flor de piel ante el partido más importante en la historia de la institución.
Xelajú está a solo 90 minutos de la gloria. Este miércoles, el cuadro dirigido por Amarini Villatoro buscará levantar su primer título internacional cuando reciba a Liga Deportiva Alajuelense, reciente bicampeón centroamericano.
El empate 1-1 obtenido en Costa Rica le da un margen favorable: ganar o igualar sin goles les permitiría coronarse.
Sin embargo, el contexto no es ideal. El encuentro se disputará en el Estadio Cementos Progreso, la sede alterna que han utilizado durante todo el certamen, después de que Concacaf deshabilitara el Mario Camposeco por no cumplir el requisito de contar con un aeropuerto internacional a menos de 150 kilómetros. La Aurora, el más cercano, supera con holgura esa distancia.
Con el presidente enviando aliento, la afición movilizándose en masa y un plantel decidido a hacer historia, Xelajú se prepara para vivir una noche que podría quedar grabada para siempre en el fútbol guatemalteco. En el caso de la Liga buscará evitarlo y conquistar el tricampeonato centroamericano.





