Este sábado la Asociación Deportiva Guanacasteca se pronunció con respecto a la nueva resolución del Comité de Licencias de la Federación Costarricense de Fútbol.
En la ADG insisten en que se están violando sus derechos al no permitirles participar en el fútbol de la primera división.
"A nuestra afición, patrocinadores y público en general, les decimos con absoluta claridad: la ADG no se rinde. Es más, era evidente que este atropello, y otros más, se sigan presentando: recuerden que estamos en las instancias federativas", dice el comunicado de Guanacasteca.
"Vamos a continuar nuestra defensa en la jurisdicción contencioso-administrativa, eso sí ahora con más argumentos favorables que evidencian el avasallamiento a nuestros derechos y garantías constitucionales y legales como Asociación Deportiva. Y el absoluto irrespeto a nuestro Estado de Derecho", agrega.
Los guanacastecos fueron sancionados el semestre pasado y para este certamen no pudieron arrancar el torneo.
Comunicado oficial completo
La Asociación Deportiva Guanacasteca (ADG) lamenta -aunque no se sorprende- la nueva resolución del Comité de Licencias de la Federación Costarricense de Fútbol (FCRF) que pretende, por segunda vez, sancionarnos con la revocatoria de nuestra licencia para participar en la Primera División.
¿Cuál es la nueva noticia?
Lo que está haciendo la FCRF y el Comité de Licencias es imponernos, por segunda vez, un castigo fundado en los mismos hechos, circunstancias e información financiera ya conocidos y sancionados en Semana Santa, con una clara violación al principio jurídico: non bis in idem, el cual prohíbe ser juzgado y sancionado dos veces por los mismos hechos.
Como si eso no fuera suficiente, en esta nueva resolución se cambian los argumentos, el fundamento y hasta las sanciones del primer procedimiento.
En aquél se nos reprochaban actuaciones financieras bajo una nebulosa casi delictiva. En este último, el motivo principal es una supuesta venta simulada de nuestra licencia, sin reportar esa transacción.
¿Qué está pasando?
Recordemos lo esencial:
Fue la primera sanción de revocatoria de la licencia, notificada -en Semana Santa- la que motivó a la ADG a presentar un proceso ordinario y una medida cautelar ante el Tribunal Administrativo de Conflictos Deportivos (TRIACODE).
Ese Tribunal, mediante resolución firme le ordenó a la FCRF y a su Comité de Licencias restituir de inmediato el derecho de participación de la ADG en el Campeonato 2025-2026, mientras se resuelve el caso principal y para que, conforme a la naturaleza jurídica de las medidas cautelares, se evitaran mayores daños de difícil e imposible reparación.
Esa orden del TRIACODE era clara, vinculante y de acatamiento obligatorio.
En respuesta, la ADG cumplió al pie de la letra lo indicado por el TRIACODE. Desde finales de mayo se completaron los requisitos de licencias y no es sino hasta el 17 de julio que se recibió una prevención de ese Comité para aclarar algunos temas financieros, incluidos los mismos que se habían conocido y sancionado en el proceso sumario 001-2025, y que motivaron nuestros reclamos ante el TRIACODE.
En menos de 48 horas entregamos toda la documentación requerida y bajo el principio de transparencia y buena fé volvimos a entregar la información financiera para aclarar los reproches del primer procedimiento. También nos pusimos al día con nuestras obligaciones con la CCSS y Tributación.
No obstante, ese Comité, sin justificación alguna, no se pronunció -con la celeridad requerida para proteger nuestros derechos- sobre nuestra licencia antes del inicio del campeonato de la Primera División como le correspondía. Por el contrario, la FCRF anunció públicamente un torneo con solo 10 equipos, ignorando por completo la medida cautelar a favor de la ADG y presagiando lo que hoy está pasando.
¿Por qué rechazamos esta nueva resolución?
Ahora, de forma arbitraria, injustificada e ilegal, se nos notifica una nueva sanción basada en los mismos hechos, circunstancias e información financiera sobre los que fuimos sancionados previamente y que, precisamente, se encuentra en discusión en el TRIACODE y que, además, fue lo que motivó la medida cautelar a nuestro favor, misma que sigue vigente e ignorada hasta la fecha.
En este segundo procedimiento sancionador, el Comité de Licencias tampoco le dio trámite a una recusación contra los miembros que participaron en el procedimiento que generó la primera sanción. También, deliberadamente omitió pronunciarse sobre nuestros alegatos que señalaban una falta de adecuada intimación e imputación de cargos y la existencia de una doble sanción por los mismos hechos que, precisamente, generaron nuestros reclamos ante el TRIACODE.
¿Cuál es el nuevo fundamento para revocarnos la licencia?
En abril se nos sancionó (sin reglamento inscrito y vigente) por los mismos hechos e información financiera, acreditando una supuesta falta de transparencia e irregularidades en transferencias internacionales de dineros (casi que a nivel delictivo como pregonaron voceros de la FCRF en los medios de comunicación).
También se nos impuso una millonaria multa y se ordenó el envío del caso a otras instancias para que investigaran a personas sobre supuestas actuaciones contrarias a la ética y a la normativa contable.
Ahora resulta que, en esta nueva sanción, una vez presentada la misma información financiera que se aportó en el primer procedimiento ya juzgado, el Comité de Licencias da un giro radical y ahora nos imputa una supuesta venta de nuestra licencia profesional para participar en la Primera División.
Concluye erróneamente el Comité de Licencias de la siguiente manera:
"Esta circunstancia permite al Comité concluir que es un subterfugio o “truco” para distorsionar la compra de la licencia sin la debida diligencia regulada."
Entonces, lo que sigue es una historia fácil de adivinar: nos vuelven a revocar la licencia.
Denunciamos que el nuevo fundamento para la reiterada revocatoria de la licencia -lamentablemente para nuestro estado de derecho- nunca fue intimado e imputado en ninguna de las prevenciones anteriores, por lo que, obviamente, no se nos permitió ejercer el derecho de defensa ni aportar pruebas sobre un señalamiento completamente nuevo en el debate.
Pero lo más grave es que no existe una sola prueba documental o testimonial idónea que sustente esta nueva historia. Lo que pretenden es imponernos un nuevo castigo con los Reglamentos -ahora sí inscritos - pero sin ningún respaldo probatorio, ni jurídico.
¿Qué sigue?
A nuestra afición, patrocinadores y público en general, les decimos con absoluta claridad: la ADG no se rinde. Es más, era evidente que este atropello, y otros más, se sigan presentando: recuerden que estamos en las instancias federativas.
"Vamos a continuar nuestra defensa en la jurisdicción contencioso-administrativa, eso sí ahora con más argumentos favorables que evidencian el avasallamiento a nuestros derechos y garantías constitucionales y legales como Asociación Deportiva. Y el absoluto irrespeto a nuestro Estado de Derecho",
Por el bien del deporte nacional y respeto al artículo 89 de la Constitución Política, denunciamos la captura y falta de independencia del ICODER, que en lugar de velar por la legalidad y respeto a los principios del deporte, para el caso de la ADG, parece estar alineado y en sintonía con quienes están actuando en forma arbitraria, injustificada e ilegal.
Por eso nuestra confianza está puesta en los tribunales de justicia, y no en quienes se reparten el fútbol como mercancía comercial utilizando el régimen sancionador con criterios políticos y mediáticos.
Por cierto, algunos de ellos son los mismos que justifican -con la lamentable inercia de los propios órganos internos federativos y el silencio mediático cómplice- la compra de clubes de fútbol obviando los evidentes y groseros conflictos de intereses que se están presentando en el fútbol de Costa Rica.
Seguimos de pie, con dignidad y sangre chorotega, defendiendo nuestros derechos.
¡A la carga Guanacaste!