Paredes siniestras
¿Otro película más sobre una casa embrujada? Sí, otra más, aunque hay que decir que Paredes siniestras tiene un par de particularidades.
La primera es que su realización está muy lejos de Hollywood, más precisamente en Austria, país de origen de esta cinta que dirige Daniel Prochaska. Y la segunda es que si bien se trata de una historia de terror, está dirigida a un público familiar y adolescente.
Precisamente un grupo de niños y adolescentes son los protagonistas, los que se conocen en Eisenkappel, un pequeño pueblo austríaco cerca de la frontera con Eslovenia.
Hasta ahí llega a vivir una familia alemana, que la conforman Sabina y sus dos hijos, el pequeño Eddi y el adolescente Hendrik. Pero en la casa en que se instalan empiezan a ocurrir sucesos sobrenaturales y que Hendrick comienza a investigar junto a otros dos adolescentes del pueblo.
Tanto por su historia como por su atmósfera, recuerda de inmediato -guardando las proporciones, eso sí- a la exitosa serie Stranger things, además de las historias de Scooby doo. Si hasta tiene guiños a otra popular serie de Netflix: Dark.