Antes de que falleciera el 25 de noviembre del año pasado, Diego Armando Maradona tenía pendientes algunas demandas por filiación, que hoy son importantes a la hora de establecer la herencia del astro del fútbol. Una de ellas es la de Magalí Gil, una joven de 25 años que en abril de 2019 inició el proceso en búsqueda de su verdadera identidad.
Ella nació a fines de 1995. Su madre biológica la abandonó, y desde sus primeros días vive con el matrimonio que la adoptó. Aunque ella siempre supo el nombre de su progenitora, nunca quiso buscarla hasta que un día fue la mujer quien la contactó y le reveló: “Diego Maradona es tu papá”.
Desde ese momento, tuvo una duda que hasta entonces estaba apagada y por esa razón inició la demanda.
En este sentido, este domingo Ángel De Brito sumó una importante novedad a esta causa. “Magali Gil no es hija de Maradona. Así, lo determinó una prueba de ADN, realizada con una hermana de Diego, hace 15 días”, expresó el periodista en su cuenta de Twitter.
En diciembre de 2020, tras la muerte del exfutbolista, Magalí abrió una cuenta de Instagram y grabó un video para continuar con su reclamo, aseverando que su único propósito era el de gozar del derecho universal de saber quién era su padre.
"Mi búsqueda siempre fue la misma, nunca tuvo una desviación. Siempre fue tan simple como resolver mi identidad: saber si Diego Maradona es mi padre biológico. Mi causa nunca se detuvo y nunca se va a detener. Yo no voy a parar hasta resolver esto, hasta saber si Diego Maradona es o no es mi papá biológico", dijo en aquel video subido a finales del año anterior.
Según pudo averiguar el programa Teleshow, lo que arrojó dicho estudio, que fue extrajudicial, es una “baja probabilidad de vínculo”.
Por otro lado, no es el ADN concluyente de la paternidad, que será el que se haga en un futuro con las muestras de sangre del Diez que se encuentran en la Fiscalía y que aún, por tiempos de la Justicia, no fue realizado todavía.
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