La agencia de noticias Bloomberg actualizó una vez más su ranking de “resiliencia”, que evalúa en base a distintas variables la manera en que 53 grandes economías globales han lidiado con la crisis causada por la pandemia de COVID-19.
Una combinación entre la capacidad de controlar el COVID-19 y la campaña de vacunación más veloz de de Asia hizo que Singapur encabezara la lista global por primera vez, desbancando a Nueva Zelanda en su medición.
La pequeña ciudad-estado ha logrado suprimir los casos de transmisión casi por completo gracias a las restricciones fronterizas y estrictos programas de cuarentena que permiten a los ciudadanos seguir con su vida cotidiana, incluso asistir a conciertos o viajar en cruceros. Al mismo tiempo, Singapur ha administrado vacunas suficientes para cubrir a la quinta parte de su población, un área en la que otros países que han logrado mayormente eliminador el virus, como Nueva Zelanda, Australia y Taiwan, han quedado rezagados.
Pero si hubo una lección en abril, es que la vacunación no está acabando con la pandemia.
Lugares como Francia y Chile, donde la población tiene un buen nivel de acceso a la vacuna, cayeron en el Ranking a medida que incrementaban los brotes, alimentados por mutaciones del virus cuyo origen se presenta cada vez con más frecuencia en el mundo en desarrollo, donde el suministro de vacunas es escaso y los esfuerzos de mitigación están fracasando. Mientras más de mil millones de dosis han sido administradas a nivel global, pero estas no se han distribuido lo suficiente a naciones empobrecidas como India, que impulsa los niveles de infección global hacia nuevos récords.
En ninguna parte esto ha sido más preocupante que en Polonia y Brasil, quienes cayeron a los dos últimos lugares de las 54 economías rankeadas. México, que ha ocupado el último lugar desde que el la lista debutó en Noviembre, subió poco a poco desde abril hasta el puesto 48 a medida que mejoraba sus niveles de pruebas de detección.
Estados Unidos subió cuatro peldaños este mes al lugar 17, tan pronto como el programa de vacunación mostró una reducción de muertes, a pesar de que los casos se incrementaron al relajarse las precauciones, también por la masiva campaña de vacunación.
Reino Unido avanzó siete lugares hasta el puesto 18 al levantar su confinamiento. El país combina una inoculación rápida con controles fronterizos que evitan la llegada de nuevas variantes. La más reciente excluye a viajeros de India, donde ha surgido una nueva cepa de “doble mutación”. El gigante asiático, que ahora registra más de 300,000 infecciones por día debido al rebrote, cayó 10 lugares hasta el 30 de abril.
El Ranking de Resiliencia Covid usa una amplia variedad de datos para determinar donde se está manejando la pandemia de manera más efectiva -con las menores perturbaciones sociales y económicas- y evalúa desde las tasas de mortalidad y las pruebas diagnósticas hasta el acceso a la vacuna y la libertad de movimiento. En total son 10 métricas centrales.
El inicio de la vacunación en varios lugares hace unos meses implicó que los gobiernos relajaran sus restricciones demasiado pronto, presentando la oportunidad a las variantes de sembrarse antes de que se establecieran niveles de inmunidad suficientemente altos.
Polonia ha administrado vacunas suficientes para el 13% de su población, una penetración mayor a dos tercios del mundo. Sin embargo, la variante identificada en Reino Unido afectó en gran medida a la población, al punto que ahora representa el 90% de nuevas infecciones y ha causado un pico récord de contagios y muertes. Mientras tanto, la cepa detectada por primera vez en Brasil esta asolando Latinoamérica, incluso en lugares como Chile, donde cerca de la tercera parte de la población ha sido completamente vacunada.
Aunque algunos lugares como Israel han mostrado una marcada reducción de casos gracias a la temprana y generalizada vacunación, expertos advirtieron que la complacencia aún podría deshacer su progreso. Con más del 55% de la población vacunada, Israel se colocó en el cuarto lugar del Ranking en Abril.
“Esto no ha terminado de ninguna manera”, dijo Ali Mokdad, director de la Estrategia para la Salud de la Población en la Universidad de Washington. “Mientras más se prolongue esto, más probable es que veamos nuevas variantes. Entonces será necesaria una nueva vacuna o refuerzo, y empezamos de nuevo”.
Dado que las variantes superan a la vacunación en muchos lugares, el éxito de la región de Asia y el Pacífico para eliminar y mantener lejos al COVID-19 significa que sus economías continúan dominando el Ranking. El top tres -Singapur, Nueva Zelanda y Australia- pueden proporcionar una calidad de vida prepandémica a su población, con excepción de los viajes internacionales, que básicamente se cierran para evitar que el virus vuelva a entrar.
El suministro de vacunas en gran parte del mundo es extremadamente inadecuado. Naciones ricas como Estados Unidos y Japón han adquirido las existencias de inyecciones de ARNm más buscadas y efectivas. Incluso los grandes fabricantes de vacunas en el mundo tienen suministros escasos, y naciones como India y China han tenido dificultades para producir suficientes dosis para su población. Los efectos secundarios asociados a las vacunas de AstraZeneca y Johnson & Johnson incrementan las dudas de personas de algunos lugares para vacunarse.
El destino de los tenues pasos de algunos países hacia la reapertura, y la carrera entre la vacunación y las nuevas variantes, serán puntos claves para el Ranking de Resiliencia Covid en mayo.
MOTORES NOTABLES
A continuación, tres países que subieron posiciones durante el último mes:
-Sudáfrica subió 16 lugares al reducir su tasa de letalidad casi a la mitad, 4.8% en marzo. Sin embargo, va detrás de los mercados emergentes en materia de vacunación y también es donde se identificó por primera vez una variante más transmisible.
-Portugal se colocó en el treceavo puesto a medida de que suavizó el distanciamiento social, permite la reapertura de escuelas y tiendas después de uno de los peores brotes de la enfermedad en enero.
-España subió al lugar 10 después de que su tasa de letalidad cayera de 8.3% a 1.4% en marzo, pero los casos han vuelto a aumentar
A LA BAJA:
-China bajó cinco puestos en el top 10. El país donde el coronavirus fue identificado por primera vez encontró una serie de casos en la fronteriza Myanmar. Los funcionarios bloquearon el área y analizaron a toda la población tres veces.
-Turquía se desplomó a lugar 19 después de que los casos y las muertes se dispararan y rompieran récords el mes pasado, lo que generó un confinamiento parcial que se ha expandido hasta ser total.
-Bangladesh y Filipinas se hundieron en las posiciones 13 y 10, respectivamente, después de un rebrote de las infecciones que elevó sus tasas de pruebas positivas. En Filipinas, un confinamiento prolongado en la capital empaña las perspectivas económicas.
LA TRAMPA DE LA POBREZA
Aunque el fracaso de las poderosas economías desarrolladas para frenar la propagación del coronavirus ha sido un hecho sorprendente de la pandemia, las principales naciones occidentales, como Estados Unidos y el Reino Unido, han vuelto a ganar terreno al obtener la mayor parte del suministro de vacunas y desplegar las inyecciones.
Mientras tanto, la mayoría de las naciones en vías de desarrollo aún no han comenzado a inocularse de forma significativa, por carecer del poder adquisitivo necesario para firmar acuerdos de suministro. Los países con los ingresos medios más altos se están vacunando unas 25 veces más rápido que los que tienen los más bajos.
Covax, el esfuerzo respaldado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para ayudar a los países más pobres a adquirir dosis, no empezó a distribuir vacunas hasta finales de febrero.
La creciente crisis en el mundo en desarrollo está presionando a las economías avanzadas a hacer más por ayudar. En la India, donde se están produciendo escenas devastadoras de escasez de oxígeno y crematorios desbordados, los fabricantes de vacunas afirman que la capacidad de producción está limitada porque Estados Unidos da prioridad a las materias primas para su propio uso. Mientras tanto, el gobierno del presidente Joe Biden también tiene una reserva de decenas de millones de dosis adicionales, después de haber asegurado las suficientes para la población adulta estadounidense.
Las disparidades en la inmunidad suponen una amenaza para el mundo: cuanto más se extienda el coronavirus sin control, más oportunidades habrá de que se desarrollen nuevas y peligrosas mutaciones. Algunas vacunas existentes ya han demostrado ser menos eficaces contra nuevas variantes como la de Sudáfrica, y no se puede descartar la posibilidad de que una mutación entre en un país vacunado y provoque una nueva oleada.
“Necesitamos que los países y las empresas que controlan las herramientas que podrían salvar vidas compartan los recursos financieros, las dosis de vacunas y los conocimientos técnicos, y que sean transparentes sobre sus donaciones bilaterales”, tuiteó en abril el director general de la OMS, Tedros Ghebreyesus.
Es probable que el golpe de la pandemia a las economías emergentes sea más largo y sostenido.
Muchas ciudades en Latinoamérica no podrán regresar a los niveles de crecimiento pre pandémicos hasta 2023 y el ingreso per cápita no se recobrará hasta 2025, más tarde que cualquier otro lugar según el Fondo Monetario Internacional.
El Banco Mundial dijo que la pandemia llevará a más de 150 millones de personas a la pobreza extrema a finales de 2021.
VENTAJA DE LA VACUNA
Es en la vacunación donde los antiguos rezagados como Estados Unidos y Reino Unidos han recuperado terreno, y la inversión en ciencia e investigaciones ha demostrado ser fundamental cuando se trata de vacunas. En la Operación Warp Speed se invirtieron unos $18 mil millones en el desarrollo de las primeras vacunas, que ahora se han administrado para cubrir el equivalente al 35% de la población estadounidense.
En Israel, donde más de la mitad de los nueve millones de personas del país están vacunados, la vida se ha normalizado rápido. El teatro en vivo y los eventos deportivos volvieron, ya no es necesario utilizar cubrebocas al aire libre, los restaurantes y bares están llenos y los estudiantes asisten a clases presenciales. En Reino Unido, algunos pubs se encuentran abiertos, mientras que en Estados Unidos las reservas de viajes nacionales están aumentando.
Aun así, reconociendo que estos avances son frágiles, las autoridades están intentando reabrir con cautela. Israel permitirá que turismo internacional comience el 23 de Mayo, pero solo por etapas, empezando por grupos de fácil seguimiento. Reino Unido, permitirá viajes no esenciales a una lista de países con “luz verde” el próximo mes, pero el gobierno pide a los ciudadanos que reduzcan sus expectativas para las vacaciones de verano.
Incluso en Estados Unidos, donde se han rehusado a imponer restricciones de viajes, el Departamento de Estado emitió una guía en Abril advirtiendo a los viajeros de no ir a más de cien países por riesgo de COVID-19.
El esfuerzo mundial de vacunación ha experimentado algunos reveses importantes, con reportes de coagulación sanguínea después de la inoculación asociadas a las vacunas de AstraZeneca y Johnson & Johnson. Aunque los lanzamientos se reanudaron luego de que los reguladores dijeron que los beneficios superan a los riegos, la controversia desanimó a algunas personas de vacunarse.
En la región de Asia-Pacífico, el retraso en el inicio de la inoculación se ve agravado por la indecisión generalizada. Tras el éxito inicial en la contención del virus, los habitantes de lugares como China y Japón parecen menos entusiastas a la hora de vacunarse en comparación con las naciones occidentales, y algunos no ven la necesidad urgente.
Con brotes más pequeños y pocas víctimas mortales, estas economías siguen teniendo una ventaja en el ranking de resiliencia, pero ¿por cuánto tiempo?
¿FÓRMULA MÁGICA?
El bajo rendimiento de algunas de las democracias más destacadas del mundo en la contención del coronavirus, en contraste con el éxito de países autoritarios como China y Vietnam, ha planteado dudas sobre si las sociedades democráticas están preparadas para hacer frente a las pandemias.
El Ranking de Resiliencia Covid de Bloomberg cuenta una historia diferente: las democracias han integrado la mayoría de los 10 primeros puestos desde el debut de la medida en noviembre. El éxito en la contención del COVID-19 con la menor perturbación parece depender menos de la capacidad de ordenar a la gente que se someta y más de que los gobiernos fomenten un alto grado de confianza y conformidad social.
Cuando los ciudadanos confían en las autoridades y en su orientación, es posible que no se necesiten cierres, como demostraron Japón y Corea del Sur durante la mayor parte de 2020, aunque las feroces olas invernales desafiaron definitivamente esos enfoques más abiertos.
Nueva Zelanda, que ahora ocupa el segundo puesto tras cinco meses en la cima, ha hecho hincapié en la comunicación desde el principio, con un sistema de alerta de cuatro niveles que ofrece a los ciudadanos una imagen clara de cómo y por qué actúa el gobierno a medida que evoluciona el brote. Al igual que China, Singapur y Australia, también cerró sus fronteras, lo que ha demostrado ser una métrica clave para el éxito de la contención.
La inversión en infraestructuras de salud pública también es importante. Infravalorados en muchos lugares antes de 2020, los sistemas de rastreo de contactos, las pruebas efectivas y la educación sanitaria reforzaron los mejores resultados, ayudando a socializar el lavado de manos y el uso de mascarillas. Según Anthony Fauci, máximo responsable de las enfermedades infecciosas en EE.UU., esto ha sido clave para evitar bloqueos económicamente paralizantes. Singapur, el nuevo número 1, exige el uso de mascarillas en público y utiliza aplicaciones para facilitar el rastreo de contactos.
¿Y AHORA QUÉ?
El Ranking de Resiliencia Covid de Bloomberg es una fotografía de cómo se está desarrollando la pandemia en 53 grandes economías. Al centrarse en el progreso de la distribución de las vacunas, también proporciona una ventana a cómo puede cambiar la suerte de estas economías en el futuro.
No se trata de un veredicto final; nunca podría serlo, dadas las imperfecciones de los datos sobre el virus y las vacunas y el rápido ritmo de esta crisis, que ha visto cómo las olas posteriores confundían a los lugares que manejaron bien los brotes inicialmente. Las circunstancias y la suerte también influyen, pero son difíciles de cuantificar.
El despliegue de la vacuna es un factor decisivo en 2021, con retos que van desde la logística y el almacenamiento hasta la indecisión a la hora de inocularse. Aun así, tras haber soportado más de un año de lucha contra el COVID-19, los gobiernos y las poblaciones tienen ahora un mejor conocimiento del patógeno, de la mejor manera de frenar su propagación y de mitigar los daños que inflige.
Fuente: Bloomberg - Infobae