Michael Jerome Oher fue un deportista profesional estadounidense. Tuvo éxito como jugador de fútbol americano.
Se desempeñó en la posición de offensive tackle en los Carolina Panthers hasta el 2017.
Fue seleccionado por los Baltimore Ravens en la primera ronda del Draft de la NFL 2009. Jugó a nivel universitario en la Universidad de Misisipi para los Ole Miss Rebels.
Los acontecimientos de su vida acaecidos entre su último año de la escuela preparatoria y su primer año universitario sirvieron como base para el libro de 2006 The Blind Side: The Evolution of a Game del escritor Michael Lewis y para la película de 2009 Un sueño posible.
Aquí parte de su testimonio
"Nadie me quería… hasta que una mujer me dijo: ‘Ven, esta es tu casa.’"
Mi nombre es Michael Oher. Crecí en Memphis. Mi mamá era adicta. Mi padre desapareció. Dormía donde podía… y muchas veces, no comía.
A los 7 años ya había pasado por 11 escuelas. Era invisible. Hasta para el sistema.
Recuerdo que lo único que tenía era una bolsa con ropa sucia. Nadie creía en mí. Ni siquiera yo.
Pero un día, caminando solo por la calle, una mujer me vio. Su nombre era Leigh Anne Tuohy.
Y en lugar de apartarse… se detuvo. Me miró a los ojos y dijo:
“¿Tienes un lugar donde dormir esta noche?” Yo dije que no. Ella solo respondió: “Entonces ven, esta es tu casa.”
Esa noche dormí en una cama que no era un suelo. Y por primera vez… me sentí a salvo.
No fue fácil. No confiaba. No hablaba mucho. Pero ellos no se rindieron. Me enseñaron a leer bien. Me apoyaron en la escuela. Me cuidaron. Y me enseñaron una palabra que antes no entendía: familia.
Años después, llegué a la NFL. Pero eso no fue lo más importante. Lo más importante fue que alguien me vio cuando yo pensaba que no valía la pena mirar.
“No necesitas tener la misma sangre para ser familia. Solo necesitas un corazón dispuesto a ver lo que otros no ven.”
Cuando hicieron la película, no me reconocía al principio. No por lo físico… sino porque nunca imaginé que mi historia valiera la pena ser contada.
Hoy sigo ayudando a jóvenes que, como yo, crecieron sin hogar ni esperanza. Porque entiendo lo que significa tener frío, hambre y miedo… y lo que cambia la vida cuando alguien se atreve a decirte: “Tú sí importas.”
“No fue el fútbol lo que cambió mi vida… fue un acto de amor.” Michael Oher
