“La ilusión jamás la perdemos, por eso estamos viajando y acompañando al grupo, para darles ánimo y hacerles sentir que confiamos en sus capacidades”, declaró Atala antes de abordar la aeronave con destino a tierras ticas.
El máximo líder de los motagüenses reconoció que enfrentarán a un gran equipo, con una afición que presiona y será partido muy duro de sacar adelante.
“Soñamos que sea con una noche memorable para Motagua, para el balompié hondureño y realicemos un gran partido que nos permita traer el triunfo. Sin embargo, recordemos que esto no se define en 90 minutos, sino en 180”, agregó.
Para Motagua es su tercera final en campeonatos Centroamericanos: “Esto no es nuevo para ellos (jugadores), es la final número 12, el equipo nervioso debe de ser el Saprissa, ellos están en la obligación de sacar su marcador, saben que venir a Tegucigalpa no será fácil”.
Por último, Atala tuvo un mensaje para la afición del Motagua: “En la vuelta independientemente del resultado que se consiga en este primer juego, confiamos en que la afición acompañará al equipo y el Estadio Nacional se pintará de azul. Hemos demostrado ser un equipo estable, con un plan claro y todos los motagüenses tenemos motivos para apoyar este proyecto”.
La final de vuelta en territorio catracho se jugará el 26 de noviembre.
Fuente: Diario Más y Diario Diez Honduras
