"Enfrentamos a una selección muy dinámica, con una estructura ya establecida, de muy buen pie y con mucha velocidad. Eso nos costó controlarlo, pero el gol nos dio esa calma y nos sentimos mejor en el partido con más posesión de pelota. Al final Perú no quería perder ante su gente y terminamos con un 5-4-1", analizó.
El timonel enfatizó que fue un buen ensayo pero nada más "Nuestra realidad está muy lejana, estamos en construcción y hoy fue simplemente un ensayo para todo lo que sigue por delante", citó.
Cuando le preguntaron sobre como se sentía por estos dos triunfos se desahogó "Siento una alegría, en este periodo y transcurso del tiempo hay cosas que se hablan de más y duelen, evidentemente ante cuatro derrotas no iban hablar cosas buenas. Pero hay que echarnos un poquito de flores, le ganamos a un gran rival", afirmó.
"Nos vamos contentos, tenemos una nueva esperanza, una nueva credibilidad, rescatamos jugadores que todos pensaron no serían parte de este proceso y para enero el profe Gustavo Matosas pueda tomarlos en cuenta, incluso me atrevo a decir que hay más esperando otra oportunidad y la gente ya no los contempla", dijo.
González añadió "Yo siempre estuve muy tranquilo, cinco de los seis partidos fueron de visitante, el único fue contra Colombia neutral, pero con una cantidad considerable de colombianos. Por el ejemplo a Asia fue un equipo muy joven", citó.
Para finalizar el técnico dio su punto de vista sobre lo positivo y negativo de la Selección "Positivo sin duda la actitud y entrega del equipo, lo que vieron todos en la cancha es parte del oficio de ellos y también de una idea que intentamos plasmar en muy pocos días; lo negativo es que Costa Rica tiene que mantener más la pelota cuando nos ponemos en ventaja, tener más movilidad y así no depender tanto de Kendall Waston con su juego aéreo pero con entrenamiento se mejora", puntualizó.
González le dedicó el triunfo a un gran amigo como lo fue Gabriel Badilla quien hace pocos días cumplió dos años desde su fallecimiento.
