Floyd Mayweather Jr., uno de los grandes campeones de la historia del boxeo y de los personajes más carismáticos que tiene este deporte, se enfrentó en un combate de exhibición en el Hard Rock Stadium de Miami (Florida) ante el youtuber Logan Paul, una celebridad con escasa experiencia sobre los cuadriláteros pero con el alcance mediático necesario para ser parte de un evento millonario.
Pese que se esperaba una victoria fácil del ex púgil de 44 años, el youtuber aguantó los ocho asaltos y al no haber jueces, no hubo ganadores ni perdedores. Aunque el ex boxeador demostró ser mejor entre las cuerdas, no pudo derribar a su oponente.
El primer asalto fue de análisis entre ambos, con pocos ataques y mucha atención. Sin embargo, sobre el final Paul, recorrió poco la lona a diferencia de su movedizo rival, pudo desenfundar una serie de golpes que dejaron contra las cuerdas al campeón, quien pudo soportarlos. El segundo acto fue similar, con Mayweather moviéndose de un lado al otro intentando desgastar a su oponente, cuya altura (1,88 metros) y sus brazos largos mantuvieron la alarma encendida en el ex púgil.
En el tercero empezó el show del ex boxeador norteamericano. Sin haber lanzado prácticamente ningún golpe hizo que el youtuber empezar a padecer el tiempo y se mostrara cansado. Así, lo arrinconó en varias ocasiones y logró conectar dos zurdazos al rostro que hicieron tambalear a la estrella de las redes, que pese a todo se mantuvo de pie.
En el quinto hubo intento de reacción de Paul, quien terminó lanzando golpes al aire porque nunca pudo conectar a Money, que a los 44 años hizo una muestra de talento y velocidad en cada defensa. La tónica no cambió en el siguiente bloque en el que se notó aún más el desgaste del youtuber y la tranquilidad de un Floyd que parecía no querer acabar la contienda por la vía rápida.
Pese a esto, los fans se quedaron con las ganas de ven un nocaut. Los ocho asaltos se completaron en su totalidad y Mayweather no intentó noquear, aunque dejó una mejor imagen. Al no haber jueces por tratarse de una exhibición, no hubo ganador ni perdedor. Pero Paul se probó a él mismo y al mundo que pudo aguantar: “Acabo de pelear contra uno de los mejores boxeadores de todos los tiempos, así que que nadie me diga que algo es imposible”, declaró al final.
Mayweather, quien no peleaba por un título de boxeo profesional desde que venció a Andre Berto en 2015 y se subió por última vez al ring en 2018 cuando se impuso al campeón de kickboxing japonés Tenshin Nasukawa, rompió este domingo a los 44 años con su inactividad para “entretener y ganar dinero”.
Desde su pelea ante Conor McGregor del 2017, que alcanzó las 4,3 millones de ventas en Pay-Per-View (PPV), Floyd empezó con esta tendencia de buscar oponentes fuera del boxeo, que ahora ya ha cruzado incluso las fronteras del deporte. Por eso se midió ante un inexperto rival que colabora con sus intereses: los promotores esperan que las ventas del PPV, a un precio de USD 49,99 en Estados Unidos, lleguen a los dos millones.
Logan Paul es un joven de 26 años que construyó su fama y se hizo millonario con vlogs diarios en Internet. Junto a su hermano Jake han empezado a incursionar en el boxeo. En el caso de Logan, se enfrentó al youtuber británico KSI en Manchester en agosto de 2018 en una pelea terminó en empate. Ambos luego acordaron una “revancha”, que tuvo un tono más profesional y se celebró en noviembre de 2019 en el Staples Center de Los Ángeles. Aquella derrota fue la única presentación oficial que registra, sin embargo fue un evento con tanto éxito que captó la atención de una leyenda como Floyd Mayweather.
Fuente: Infobae