La combinación de dos generaciones y el mejor tenis del mundo se vio este viernes en la semifinal de Roland Garros donde Novak Djokovic venció a Carlos Alcaraz en cuatro set por 6-3, 5-7, 6-1 y 6-1.
El español sufrió unos calambres que lo complicaron y el serbio se valió de eso para poder liquidar el pleito en los últimos dos parciales.
Nole jugará su séptima final en el Abierto de Francia e irá por su tercer triunfo en este torneo de Grand Slam. Se verá las caras ante el noruego Casper Ruud, quien venció al alemán Alexander Zverev.
Fue un primer parcial jugado con maestría de ambos lados de la red, pero con un Djokovic implacable ante cada oportunidad. Para graficarlo: Alcaraz tenía bola de quiebre para ponerse 5-4, pero Nole metió tres saques ganadores consecutivos para revertir el game y firmar así el 6-3 a su favor. El serbio había inclinado la balanza para su lado en el cuarto game cuando quebró el saque del español en la primera bola favorable que tuvo. Luego, con el duelo 4-2, se repuso de tres break points y puso las cosas 5-2. Cerró ese primer set con 7 tiros ganadores contra los 14 de su contrincante, pero con 11 errores no forzados vs. los 16 que sumó Alcaraz.
El español apareció para ponerle suspenso al partido en el segundo set, aunque tuvo que trabajar más de la cuenta. Fue un parcial que estuvo marcado por, tal vez, el mejor punto de toda la actual edición del torneo tras una magnífica ejecución de Alcaraz de Espalda. El jugador de 20 años debió pelear durante casi una hora y cuarto para firmar un 7-5 que nivele el marcador, luego de desaprovechar tres set points en el décimo game que le hubiesen permitido terminar antes el parcial. ¿El detalle? Djokovic debió ser atendido por los médicos en el antebrazo derecho cuando el tanteador estaba 4-3.
Sin embargo, fue el Alcaraz el que luego mostró complicaciones físicas por uno calambres que lo afectaron en el gemelo de su pierna derecha. Fue en la última bola del primer game del tercer set. El español pidió asistencia al médico cuando Djokovic estaba 2-1 en el tercer set. Nole aprovechó esta situación y logró firmar su triunfo en ese parcial por 6-1.
En el cuarto parcial Nole siguió aprovechando los problemas físicos de Alcaraz y arrancó ganando los primeros puntos. No obstante, Charly mostró algunos destellos como un globo para y otro punto por lo que se ganó el aplauso del público.
Pero la supremacía del serbio continuó y terminó llevándose el cuarto set por 6-1 y consiguió el pase al partido decisivo del Abierto de Francia. Será la séptima final que juegue Djokovic en Roland Garros.
“Fue mala suerte para Carlos. A este nivel lo último que quiero son calambres. Lo siento por él y espero que se recupere pronto”, dijo el serbio. “Estoy seguro que va a ganar este torneo muchas veces. Es un gran competidor y una gran persona. Es muy difícil para él, retirarse o seguir. Lo felicito como competidor por quedarse hasta el último punto”, agregó.
“En el segundo set estuvimos mano a mano. Luego en el tercero me di cuenta que él no podía moverse”, reconoció Nole. “Es un gran jugador y mereció ganarlo. Tuve que ser agresivo porque sino iba a ser él el ganador por lo agresivo que es. Es extenuante estar al mismo nivel. Estoy feliz y orgulloso de haber alcanzado otra final”, destacó.
Si Djokovic gana el domingo alcanzará su tercer triunfo en el Abierto de Francia y será el único jugador en la historia que gane tres o más veces uno de los principales torneos.