Una vez más, Roger Federer pisó el césped de Wimbledon y rompió marcas. En esta ocasión, el suizo llegó a 350 triunfos en Grand Slam, algo inédito tanto en el circuito masculino como femenino.
Pero por si eso no fuera suficiente, con su victoria sobre Lucas Pouille por 7-5, 6-2 y 7-6(4), también se convirtió en el tenista con más presencias en los octavos del certamen.
Y eso no es todo, si pasa una ronda más, igualará el estadounidense Jimmy Connors, quien tiene el récord de más triunfos sobre césped, con 185. ¿Lo logrará? Tal parece que para Federer no hay imposibles.