El boxeador Manny Pacquiao fue proclamado el jueves nuevo senador de Filipinas, un triunfo que lo acerca a un posible asalto a la presidencia del país.
En la ceremonia de asunción, un funcionario electoral presentó a Pacquiao como el "campeón del pueblo" y pronunció su nombre con la misma cadencia con la que es presentado en un ring de boxeo, lo que provocó los vítores del público.
El deportista, de 37 años, recibió más de 16 millones de votos y terminó séptimo entre los 12 nuevos senadores salidos de los recientes comicios. A principios de año anunció que colgaría los guantes para convertirse en político a tiempo completo.
Pacquiao es considerado un héroe en su país, que se paraliza cada vez que se emiten sus peleas por televisión para sus seguidores puedan animarlo. En el pasado dejó caer que consideraría optar a la presidencia del país, pero cuando se le pregunta sobre el tema suele echar balones fuera alegando que es demasiado joven.
Durante la campaña para el Senado, Pacquiao logró recuperar la popularidad que perdió de golpe en febrero cuando declaró que las personas que mantenían relaciones homosexuales son "peores que animales". El piadoso candidato se disculpó con la gente que se sintió ofendida por sus palabras, pero dejó claro que se oponía a los enlaces entre estas parejas.
