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El PSG, con el costarricense Keylor Navas ausente por sanción, se llevó este domingo los tres puntos de visita ante el Saint-Étienne (1-3). Debutó Sergio Ramos y Neymar terminó lesionado. 

El partido arrancó muy mal para el PSG: Tanto que el Saint-Étienne comenzó a comerle terreno y marcó primero.

 

Bouanga disparó, no llegó a tiempo Ramos para cubrirle. Ese primer envite lo paró Donnarumma, no el segundo. El rechace fue caerle otra vez a Bouanga y, esta vez, sí fue al fondo de la red.

Pasaron las imágenes por la sala VAR. El árbitro creyó que estaba en fuera de juego cuando se hizo con el esférico, pero la tecnología le corrigió y, gracias a eso, el Saint-Étienne vio subir el primero al marcador.

   

La nevada ayudó al Saint-Étienne para mantenerse por encima en el marcador. Tuvieron ocasiones Mbappé y Neymar en la primera mitad, pero la suerte no estuvo de su lado.

Hasta que llegó el minuto fatídico. Kolo vio la roja por una entrada sobre Mbappé. El árbitro entendió que levantó demasiado la pierna cuando ya no podía llegar de ninguna manera al esférico. Decidió mandarlo a la calle.

 

Y aprovechó la inferioridad numérica Marquinhos gracias a Messi para, de cabeza, hacer que el partido volviera a empezar. 1-1 al descanso y un castigo inmerecido para el Saint-Étienne.

A la vuelta del descanso, el Saint-Étienne no se dejó amilanar. Por momentos, ni se notaba que estaba con diez. Supieron plantar cara a Messi, Di María y compañía.

Fue precisamente el Fideo quien hizo el 1-2, aunque medio gol se lo debe a Messi. El rosarino hizo de las suyas, recortó a todo zaguero que se cruzó en su camino y puso un pase picado entre dos futbolistas a Di Maria para que su compatriota terminara el trabajo. Y lo hizo.

Colaboró Messi en el tercero y definitivo, obra también de Marquinhos. Calcó su primer gol y, otra vez de cabeza, firmó el 1-3. El argentino, como en el caso de Di Maria, le puso el pase perfecto para que, con un testarazo, pudiera batir a Green, que hizo paradas de todos los colores a los del PSG a lo largo del partido.

La mala noticia del partido, la lesión de Neymar. Cayó, pisó a Maçon y se reventó el tobillo. No pudo salir del terreno de juego por su propio pie, tuvieron que entrar las asistencias y se marchó llorando a lágrima viva.

Amargó en cierto modo Neymar ese debut de Ramos y el show de asistencias de Messi, pero se lleva el PSG los tres puntos, una inyección de ánimo tras el pinchazo ante el City de la Champions.

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