Selección de Comoras se queda sin porteros y tendrá que utilizar a jugador de campo ante Camerún
En su partido de octavos de final de la Copa África ante Camerún, Comoras tuvo que alinear como portero a un futbolista que no es portero.
Chaker Alhadhur se encargó de dar un paso al frente. Este lateral del Ajaccio no solo cuajó una actuación meritoria para no ser especialista, sino que mantuvo vivos a los suyos con varias paradas importantes.
Con un número 3 puesto con cinta a la espalda y una camiseta que no era la que debía llevar ese día, Chaker Alhadhur se convirtió en el gran protagonista. Le tocó ocupar el lugar bajo palos que los tres porteros de la plantilla no pudieron, dos de ellos por coronavirus y el último, por lesión.
No se esperaba mucho de Alhadhur y era comprensible porque no es cancerbero, sino lateral. Milita en el Ajaccio, de la Ligue 2 francesa, donde ni siquiera es titular de manera asidua. Durante los días previos a la disputa del decisivo duelo con Camerún, se pidió voluntario para entrenarse bajo palos y tratar de, al menos, dar la cara en el césped.
Y vaya si la dio. Aunque cometió errores propios de un jugador de campo bajo palos en los goles de Toko Ekambi y Aboubakar, que labraron el 2-1 con el que terminó el encuentro, llevó a cabo varias intervenciones de mérito. La que más, una doble parada que podría haber firmado perfectamente un guardameta de Primera.
Corría el minuto 54 cuando, a mano cambiada y de una forma ciertamente extraña desde el suelo, sacó un disparo raso para, en el rechace, reponerse y despejar un segundo tiro con las palmas de los guantes. Se ganó las felicitaciones de sus compatriotas, que acudieron en masa a brindarle gestos de cariño conscientes de que había evitado el 2-0, que acabaría llegando de todos modos.
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Pero la doble parada no fue la única intervención notoria de Alhadhur, que pudo pecar de saltarse miles de normas de primero de portero, pero no de falta de valentía. En el minuto 26, ya salía corriendo de sus dominios para despejar de cabeza, como mejor sabe hacer, un pase en largo que amenazaba con llegar a un atacante rival.
En el 48', ante un testarazo a bocajarro de Aboubajar, torció los pies a la perfección para, con las botas, despejar el remate del '10', que iba picado abajo, como los delanteros saben que pueden hacer mucho daño a los cancerberos. En este caso, no era un cancerbero, sino un lateral que se estaba ganando el corazón de su hinchada. Hasta se ganó el respeto de Onana, que se acercó para abrazarle después del partido.
Con Camerún mirando de reojo el cronómetro y Comoras volcada al ataque, la gran machada que hubiera hecho las delicias no solo de los seguidores comorenses, sino del mundo entero, no pudo ser. Ni con un golazo desde lejísimos de M'Changama que amenazaba con ser la simiente de la sorpresa.
Aun así, Comoras puede estar satisfecha y, más en concreto, Alhadhur, que cuajó una gran actuación y demostró que, en esto del fútbol, el descaro y las ganas de triunfar hacen a cualquier equipo tener mucho terreno ganado. "¡Ni siquiera sé si esto ha pasado alguna vez en la historia del fútbol!", declaró una vez acabado el encuentro en 'beIN Sports'. Quizá tenía razón y esto jamás había pasado en la historia del fútbol, pero ahora sí ha pasado. Y ha pasado con él como protagonista.
Fuente: es.besoccer