Lamentable imagen dejó la derrota del Gremio de Brasil 1-3 ante el Palmeiras, este domingo cuando los aficionados del equipo local invadieron el terreno de juego provocando muchos daños y a los jugadores huyendo a los vestuarios.
Las imágenes eran insólitos al ver gran cantidad de fanáticos del Gremio como destrozaron parte del recinto, se llevaban por delante los micrófonos de ambiente e incluso la zona técnico del VAR fue vandalizada.
En medio del caos el delantero del Palmeiras, Rapahel Veiga, anotador de los dos primeros goles de su equipo y que estaba dando declaraciones post partido, tuvo que huir al túnel de vestuario, también el cuarteto arbitral que aún se encontraba en el campo de juego.
De igual forma, los fotógrafos debieron salir corriendo, ya que la puerta que abrieron los aficionados se encontraba al lado de la zona en la que fueron asignados.
El Gremio está pasando por una mala situación en lo deportivo, ya que se encuentran en los puestos de descenso con 26 puntos.
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