No levanta cabeza el Liverpool. Carece de capacidad de reacción el cuadro de Jurgen Klopp, que este sábado fue un juguete en manos del Wolverhampton en la Premier League de Inglaterra.
Encajó los dos primeros goles pronto, antes del cuarto de hora, pero no supo encontrar la manera de dar un giro al encuentro, de dar un golpe de timón.
Con la eliminatoria de Liga de Campeones contra el Real Madrid a la vista, los 'reds', sin otros objetivos ya, afearon su imagen ante el cuadro del entrenador español Julen Lopetegui, que pudo tener un triunfo aún mayor.
Acumula cuatro encuentros sin ganar el Liverpool -tres derrotas y un empate- y es décimo en la clasificación. A diez puntos tiene el cuarto lugar, que da acceso a la Liga de Campeones del próximo curso. La plaza europea del Tottenham, quinto, la tiene a siete. Y está eliminado de la FA Cup y la EFL Cup.
Su falta de concentración le condenó. A los seis minutos, el Wolverhampton Wanderers tomó ventaja. El coreano Hwang Hee-Chan recibió el balón, alcanzó la línea de fondo y centró. Se imterpuso Joel Matip, que desvió el balón hacia la meta de Alisson.
El segundo fue en el minuto 12. Nació en una falta lateral que terminó en un centro al área, Cody Gakpo despejó y el balón cayó a Craig Dawson, que ejecutó un disparo perfecto imposible para el meta brasileño.
No encontró la manera Klopp de dar la vuelta a la situación. No le funcionaron los cambios y su zaga quedaba en evidencia una y otra vez ante las rápidas transiciones locales.
El Wolverhampton sentenció el choque en el minuto 71, en un contraataque. Joao Moutinho recuperó el balón y se lo envió a Adama Traoré, que emprendió una carrera marca de la casa. Centró a Ruben Neves, que, solo ante el meta, batió otra vez a Alisson.
MÁS INFORMACIÓN
- Puntarenas FC nombra a Silvia Bolaños como delegada ante la Unafut
- Kendall Waston resalta en lista de defensas goleadores del mundo publicada por la IFFHS
- Jewison Bennette observó desde la banca empate del Sunderland
- Everton le gana 1-0 al líder Arsenal y el Manchester City podría acortar diferencia
- Un espejo y unos zapatos blancos: las pruebas definitivas que pueden salvar o incriminar a Dani Alves