La selección de Inglaterra tendrá que jugar a puerta cerrada los dos próximos partidos de la UEFA en los que sea local, el segundo de ellos condicionado durante un periodo de prueba de dos años, por los incidentes ocurridos durante la final de la pasada Eurocopa el 11 de julio, en la que Italia ganó el título frente a la escuadra inglesa.
La UEFA confirmó este lunes la decisión de su Órgano de Control, Ética y Disciplina adoptada por falta de orden y disciplina dentro y en los alrededores del estadio de Wembley, tras la investigación llevada a cabo por un Inspector de Ética y Disciplina del organismo y el posterior procedimiento disciplinario abierto contra la Federación Inglesa.
La sanción conlleva también una multa de 100.000 euros a la Federación Inglesa por la falta de orden y disciplina dentro y alrededor del estadio, por la invasión del terreno de juego, por el lanzamiento de objetos y por los disturbios durante los himnos nacionales.
El ministerio del Interior del Reino Unido confirmó el pasado día 14 que un total de 92 personas fueron arrestadas durante los partidos de la Eurocopa jugados en Londres.
Las cifras del ministerio reflejaron que 39 de los arrestos se produjeron en la final contra Italia, 28 en el duelo contra Escocia en la fase de grupos y 18 en la semifinal contra Dinamarca. Además hubo otras seis personas arrestadas en el encuentro entre Italia y España en las semifinales.
La selección inglesa, incluida en el grupo I de la fase de clasificación para Catar 2022, debe jugar su próximo compromiso como local el 12 de noviembre ante Albania y cerrará la misma tres días después en San Marino.
Inglaterra lidera el grupo con 20 puntos (seis victorias y dos empates), seguida de Polonia con 17, Albania con 15 y Hungría con once.