La investigación del jurado sobre la muerte de Emiliano Sala se pospuso hasta el 14 de febrero de 2022, pero el juicio de David Henderson ha comenzado este lunes.
En los próximos 10 días será juzgado el que seguramente sea gran culpable de la muerte del jugador que había fichado por el Cardiff City procedente del Nantes, pero que nunca pudo completar su contratación por su fallecimiento en el trágico accidente de avión en enero de 2019.
Henderson, de 67 años, ha admitido este lunes que organizó el vuelo en el que falleció Emiliano Sala y el piloto David Ibbotson sin tener permiso ni autorización de las autoridades británicas. La acusación le culpaba de poner en peligro la aeronave y a las personas que viajaban en ella, así como de operar un avión comercial sin permiso, cargos de los que solo ha admitido el segundo. Sobre la primera parte de la acusación habrá que esperar al desarrollo de estos 10 días.
El avión que transportaba a Sala se estrelló en el Canal de la Mancha en enero de 2019. El cuerpo del jugador fue recuperado del lecho marino el mes siguiente, pero el cuerpo del piloto nunca apareció. En una audiencia en octubre de 2020, el tribunal escuchó cómo la licencia de Ibbotson para volar un avión comercialmente había expirado en noviembre de 2018.
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La Subdivisión de Investigaciones de Accidentes Aéreos explicó que la aeronave había estado perdiendo monóxido de carbono durante el vuelo y una maniobra final del piloto para detener el avión había provocado que se rompiera en el aire. Henderson fue el encargado de fletar la aeronave a pedido del intermediario Willie McKay y su hijo Mark, quienes habían sido contratados por el Nantes para realizar la transferencia.
Los investigadores también subrayaron que el vuelo no se realizó conforme las reglas aplicadas a vuelos comerciales. El piloto navegó a vista, de noche, en condiciones meteorológicas difíciles y no tenía licencia para pilotar ese tipo de avión o para volar de noche. El avión llevaba una velocidad de 435 km/h al hacer impacto con el agua, según la AAIB, que descartó cualquier posibilidad de sobrevivir.
Cabe recordar que el club de Cardiff aseguró haber propuesto un vuelo comercial al delantero argentino, quien lo declinó. Antes de tomar el pequeño avión privado, Sala expresó preocupación por el estado del aparato. "Estoy aquí arriba del avión que parece que se está por caer a pedazos. Me estoy yendo para Cardiff", dijo Sala en un audio enviado a sus amigos por WhatsApp. "Pero ya saben, papá, que tengo miedo", agregó.
Fuente: Diario El Español