Una de las principales incógnitas del Real Madrid de cara a la próxima temporada está en el futuro de Gareth Bale. La llegada de Carlo Ancelotti ha dado un giro a los planes del club, cuya prioridad era la de desprenderse del jugador.
Sin embargo, el entrenador confía en poder recuperarlo, como contó Eduardo Inda en El Chiringuito de Jugones, donde reveló que «Bale no se va a jubilar y Ancelotti lo quiere». Lo cierto es que al italiano no le faltan razones para creer que puede sacar lo mejor del atacante.
La llegada del galés al conjunto madridista coincidió con la primera temporada del técnico en el banquillo. En ese tiempo, se vio el que ha sido el mejor momento de juego del equipo en los últimos años -con permiso del Madrid del doblete- y al mejor Bale. Su rendimiento en aquellos dos primeros años no pudo ser mejor.
El británico se confirmaba como la estrella por la que los blancos habían pagado 100 millones de euros, formando un tridente letal junto a Karim Benzema y Cristiano Ronaldo. En su primera temporada, el de Cardiff marcó un total de 22 goles y repartió 19 asistencias, unos registros que no superaría en el resto de años en los que vistió la elástica madridista. La campaña siguiente, sus números sufrieron un ligero bajón, pero también fueron buenos, con 17 goles y 12 pases de gol.