Arsenal mostró en el Sinobo Stadium una cara muy diferente a la de la semana pasada y logró el pase a las semifinales de la Europa League sin apelaciones. El equipo de Mikel Arteta plasmó un sólido nivel, a diferencia de la ida, y superó a Slavia Praga por 4-0 (global de 5-1) en la vuelta de los cuartos de final.
En el afán de conseguir la ventaja, los Gunners optaron por ceder la pelota en el comienzo y salir rápido de contragolpe. A partir de esto, y ante un rival que no les causó peligro, dieron el primer aviso al cuarto de hora por medio de Emile Smith Rowe, a quien, a instancias del VAR, le anularon un tanto por fuera de juego tras aprovechar un remate al poste.
Sin bajar los ánimos por esta decisión, los londinenses revirtieron su fortuna a los 18 minutos y lograron abrir el marcador: Smith Rowe enfrentó a los defensores checos en su ingreso al área y limpió la jugada hacia la izquierda para Nicolas Pépé, quien superó al arquero sobre la izquierda con su remate.
Este tanto del marfileño apenas fue el inicio de una ráfaga letal de los ingleses, ya que, pocas jugadas más tarde, Alexandre Lacazette estiró la cuenta de penal, mientras que Bukayo Saka, al minuto 24, firmó el tercero tras enganchar hacia dentro desde la banda derecha y definir raso al primer palo.
Para la segunda parte, los de Arteta bajaron el ritmo, pero eso no su poderío mediante la circulación de la pelota. Así, buscaron los huecos de los dueños de casa, que no consiguieron reaccionar en ningún momento, y sellaron la goleada por medio del atacante francés a los 77' tras un amague y posterior disparo de zurda en el área.
Hacia el cierre, Arsenal se encargó de dejar pasar los minutos con sus incesantes pases de lado y lado para terminar de festejar su clasificación. En las semifinales, con la dificultad en aumento, chocará ante Villarreal y ante un viejo conocido como Unai Emery.
MÁS INFORMACIÓN